¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Medio Ambiente

Sobrevivir en un futuro de calor extremo

La foto muestra a los bomberos en acción durante un incendio forestal en Landiras (Francia). En el área de Gironda, dos incendios forestales arrasaron más de 10.000 hectáreas.

La foto muestra a los bomberos en acción durante un incendio forestal en Landiras (Francia). En el área de Gironda, dos incendios forestales arrasaron más de 10.000 hectáreas.

Foto:EFE

Las olas de calor están ligadas al aumento de nacimientos prematuros, muertes fetales y suicidios.

KRISTIE L. EBI - PROJECT SYNDICATE
Si bien cerca de la totalidad de las muertes por altas temperaturas se pueden prevenir, las olas de calor matan a miles de personas en el mundo cada año. 
En estos mismos momentos, una ola de calor extremo está afectando a cerca de mil millones de personas en la India y Pakistán, “testeando los límites de la capacidad de supervivencia humana”, según advierte Chandni Singh, uno de los principales autores de referencia del ‘Sexto informe de evaluación’ del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático. En abril, el promedio de temperaturas máximas en la India central y del noroeste fue el más alto en 122 años. 
No es solo un problema del sur de Asia. En los últimos años, y en este momento, ocurren situaciones meteorológicas extremas en Europa (por primera vez en la historia, Inglaterra registra temperaturas de 40 grados), y también en Estados Unidos, Australia, Escandinavia y Japón, causando miles de hospitalizaciones y muertes adicionales. 

En este momento, ocurren situaciones meteorológicas extremas en Europa y también en Estados Unidos, Australia, Escandinavia y Japón, causando miles de hospitalizaciones y muertes adicionales

Además, el calor extremo está vinculado a aumentos de los nacimientos prematuros, bebés con bajo peso y muertes fetales; reducciones de la productividad de los empleados, mayores índices de enfermedad renal crónica de origen desconocido y aumentos de suicidios. 
En consecuencia, las temperaturas extremas constituyen un problema para “toda la sociedad”: no solo perjudican la salud humana, sino que también tienen efectos perjudiciales sobre la infraestructura, las cosechas y la mortandad de aves de granja, amenazando sustentos de vida y socavando la seguridad alimentaria. 
La cúpula de calor de 2021 en el noroeste del Pacífico y el oeste de Canadá fue un caso ilustrativo. Fue un suceso que habría sido prácticamente imposible sin el cambio climático. Los extremos de temperatura marcaron cerca de 5 grados Celsius por sobre los registros anteriores, causando unas 1.000 muertes adicionales y un aumento de 69 veces de las hospitalizaciones relacionadas con el calor. 
Los rendimientos de las cosechas de trigo y cerezas se desplomaron, y millones de mejillones, almejas y ostras se cocieron en sus propios hábitats oceánicos, amenazando la seguridad alimentaria y los sustentos de indígenas y comunidades de bajos ingresos. 

Ya cerca de un 40 % de las muertes por calor son atribuibles al cambio climático

Ya cerca de un 40 por ciento de las muertes por calor son atribuibles al cambio climático. Y, puesto que se espera que este aumente la frecuencia, intensidad y duración de las olas de calor, la urgencia de medidas adicionales para proteger a la gente no hará más que crecer. Sin una inversión inmediata y significativa para mejorar la resiliencia del sistema de salud y de la comunidad, las muertes asociadas con la exposición al calor aumentarán. 
Es necesario contar con planes de acción basados en evidencia y bien comunicados para mantener en calma y fresca a la gente y reducir las hospitalizaciones y los fallecimientos. Además de sistemas de alerta y respuesta temprana, se necesita una planificación de mayor plazo para la vida en un planeta con temperaturas más altas. Para ello hay que proveer más espacios marinos y verdes, cambiar de materiales de construcción y centrarse en maneras de refrescar a las personas, más que al entorno que las rodea. 

Examen a sistemas de alerta 

Los sistemas de alerta y respuesta temprana requieren más que un solo umbral para determinar el inicio de una ola de calor. Para que sean efectivos, también deberían incluir procesos colaborativos que aseguren que las intervenciones tengan en cuenta las capacidades y limitaciones locales. 
Los ministerios de Salud deberán trabajar estrechamente con servicios hidrometeorológicos, departamentos de policía y bomberos, servicios de emergencia, entidades responsables del cuidado del adulto mayor, y voces fiables de las poblaciones vulnerables (como adultos mayores de 65 años) y las comunidades marginadas.
Los recursos no deberían ser una barrera. Ya existen sistemas de alerta temprana, también en lugares de bajos recursos como Ahmedabad (India). Más aún, organizaciones como la Red de Información Mundial de Salud sobre el Calor reúnen experiencias y mejores prácticas locales y nacionales. La demanda de orientación adicional está creciendo, a la par de la creciente frecuencia y gravedad de las olas de calor. 

La mayoría de los sistemas actuales de alerta temprana no toman en cuenta explícitamente los riesgos de un cambio climático

Pero la mayoría de los sistemas actuales de alerta temprana no toman en cuenta explícitamente los riesgos de un cambio climático. 
Para ser más adaptables, quienes se encarguen de planificar deberían adoptar plazos para revisar cambios al comienzo y al fin de la temporada veraniega, al tiempo que desarrollan colaboraciones regionales para asegurarse de que sus mensajes sean coherentes entre sí. 
También habrá un mayor protagonismo para sistemas de alerta por niveles, como los que cuenten con lecturas de temperatura combinadas con el conocimiento local de poblaciones vulnerables. 
Por ejemplo, se podría anunciar alertas tempranas varios días antes del pico de una ola de calor para alertar a grupos en riesgo, como adultos mayores, niños pequeños y mujeres embarazadas. 
Tras ello, se podría hacer público un segundo conjunto de alertas cuando se alcancen temperaturas algo más altas para trabajadores en exteriores y personas del ámbito deportivo o temas relacionados, seguido de un tercer grupo para el público general en el umbral habitual para declarar una ola de calor. Estas alertas tendrían que hacerse por vías de comunicación adecuadas, de manera que la gente tome las medidas idóneas para paliar el calor. 
Incluso tras estas mejoras, los sistemas de alerta temprana se deberían someter a pruebas de estrés para determinar su robustez en caso de situaciones de calor sin precedentes, lo que se podría hacer mediante simulaciones de escritorio para identificar puntos débiles. 

Los sistemas de alerta temprana se deberían someter a pruebas de estrés para determinar su robustez en caso de situaciones de calor sin precedentes

Estas pruebas deberían contemplar no solo olas de calor, sino riesgos concomitantes como una ola de calor combinada con un incendio forestal, o una ola de calor junto con una pandemia, como ocurrió en 2021 en el noroeste del Pacífico. 
El mapeo de vulnerabilidades puede ser una herramienta eficaz para ayudar a quienes toman decisiones a determinar donde es más necesario hacer intervenciones para proteger la salud y el bienestar de los seres humanos. 
Para un futuro mucho más cálido serán necesarias inversiones urgentes e inmediatas que aprovechen las mejores prácticas y lecciones aprendidas de los planes actuales de adaptación al calor. Habrá que ampliar la escala de los modelos cuya eficacia haya sido probada para mejorar la resiliencia y la sostenibilidad. Es posible sobrevivir a temperaturas más altas y nunca antes vistas, pero no a menos que nos preparemos para ellas. 
AUTOR: KRISTIE L. EBI, profesora de Salud Global y Ciencias de la Salud Ambiental y Ocupacional en la Universidad de Washington.
- © PROJECT SYNDICATE- SEATTLE

¿Son las olas de calor cada vez más intensas?

Por el momento, y aún sin que haya finalizado, la gran cantidad de valores extremos absolutos de temperatura que se han superado durante la ola de calor que vive el suroeste de Europa indican sin lugar a duda que es histórica, tanto en términos de intensidad como de extensión espacial y duración. 
No debería ser una sorpresa ver eventos cada vez más extremos si recordamos la frase “de la península ibérica, olvidaos”, pronunciada por el físico alemán Hans Joachim Schellnhuber ante el insoportable calor que experimentaremos en el extremo sur del Viejo Continente debido al cambio climático. Esto es solo el principio. 
Los datos aportados recientemente por el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) no dejan lugar a dudas: en 2030-2052 nos encontraremos 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales. Esto se traducirá en olas de calor más intensas, frecuentes y prolongadas a lo largo de toda Europa, especialmente en la península ibérica, un área crítica dentro de la región mediterránea. 
Desde comienzos de siglo, el Viejo Continente ha padecido olas de calor de carácter extremo de manera cada vez más habitual. La ola de calor de 2003 dejó las cifras de mortalidad elevadas, con más de 70.000 decesos. 

El Viejo Continente ha padecido olas de calor de carácter extremo de manera cada vez más habitual. La ola de calor de 2003 dejó las cifras de mortalidad elevadas, con más de 70.000 decesos

Este episodio no es un caso aislado en cuanto a mortalidad se refiere. En 2010, 54.000 personas fallecieron en la ola de calor que azotó Rusia occidental. Además del evento de 2015, esta tendencia de eventos extremos queda ilustrada por el reciente conjunto de veranos consecutivos excepcionalmente calurosos y secos de 2018, 2019 y 2020 (...).
Recientemente hemos constatado que para el periodo histórico de referencia 1971-2000, la intensidad, duración y extensión espacial de las olas de calor muestran tendencias significativamente crecientes. 
La intensidad máxima ha aumentado a un ritmo mayor que la intensidad media, con incrementos de entre 2° centígrados C² y 6° grados centígrados C² por década, mientras que el número de días de ola de calor ha subido en 3,8 días/década. La extensión media de las olas de calor también ha aumentado para este periodo un 1,71 por ciento por década, siendo aún más destacable el aumento de la extensión máxima, que alcanza un 4,3 por ciento por década. 
¿Qué podemos esperar en el futuro? Las previsiones para las próximas décadas no invitan al optimismo (...).  Además, las olas de calor no solo serán más intensas y frecuentes, sino que cubrirán una superficie cada vez más amplia de la península ibérica. 
El valor de la extensión máxima muestra un aumento más notable que el de la extensión media, oscilando entre el 6 por ciento y el 8 por ciento por década. Esto supone un escenario con más población afectada, mayor riesgo de incendios forestales y mayor demanda energética. 
AUTORES: DOMINIC ROYÉ, Investigador de Geografía Física, Universidade de Santiago de Compostela. ALEJANDRO DÍAZ POSO, Investigador predoctoral en Geografía Física, Universidade de Santiago de Compostela. MARÍA DE LAS NIEVES LORENZO GONZÁLEZ, Profesora Titular del Área de Física de la Tierra, Universidade de Vigo.
THE CONVERSATION (*). 
 *Este artículo fue publicado en The Conversation y reproducido aquí bajo la licencia Creative Commons. Haz clic aquí si quieres leer la versión original.

Casi media UE está en riesgo de sequía 

Casi la mitad del territorio de la Unión Europea (UE) está “en riesgo” de sufrir sequía tras una falta de precipitaciones prolongada, anunció la Comisión Europea, justo en un momento en que el continente está azotado por una ola de calor. 
Cerca del 46 % del territorio de la UE está expuesto a niveles de sequía considerados de riesgo, lo que significa un déficit importante de humedad del suelo, indicó el Centro Común de Investigación (JRC, por sus siglas en inglés) en su informe de julio.
Un 11 % está en nivel de alerta, con la vegetación y los cultivos debilitados por la falta de agua, agregó el informe de ese servicio de la Unión Europea.  
“Francia, Rumania, España, Portugal e Italia probablemente tendrán que hacer frente a una caída de la productividad de los cultivos”, sobre todo de los cereales, generada por el “estrés hídrico y térmico”, subrayó el Ejecutivo comunitario. 

Francia, Rumania, España, Portugal e Italia probablemente tendrán que hacer frente a una caída de la productividad de los cultivos, sobre todo de cereales, generada por el estrés hídrico y térmico

Por su parte, Alemania, Polonia, Hungría, Eslovenia y Croacia también se han visto afectadas, mientras que la cuenca del Po, en Italia, “se enfrenta al nivel más alto de sequía severa” en la UE, debido a una “sequía intensa” declarada en cinco regiones italianas, aseguraron voceros de la Comisión Europea. 
La situación también es difícil en la península ibérica, donde se dan las “condiciones propicias para los incendios forestales”, añaden en su nota los expertos del Centro Común de Investigación. 
“En España, los volúmenes de agua almacenados en los embalses están en la actualidad en un 31 por ciento, por debajo de la media de la última década”. 
Durante esta semana, las altas temperaturas en Francia y el Reino Unido ilustran la multiplicación de oleadas de calor que se están presentando en Europa en las últimas décadas a causa, según los expertos, del cambio climático. 
Las emisiones de gases de efecto invernadero en la atmósfera están aumentando la potencia, la duración y el ritmo de repetición de esas oleadas, de acuerdo con los científicos.
AFP 
BRUSELAS 

Declaran emergencia en México

El Gobierno de México emitió una declaratoria de emergencia por la extrema sequía en varias regiones, lo que le permite tomar medidas extraordinarias para garantizar el suministro de agua. 
La declaratoria de emergencia “permite implementar medidas transitorias para garantizar el abasto de agua a la población donde se presenten dichas condiciones”, dijo en Twitter la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el órgano de gobierno encargado de administrar y preservar el líquido en el país. Esas medidas temporales ordenan que quienes tengan concesiones de agua para uso agrícola o industrial permitan su uso a terceros. 
También se prevé un límite a las concesiones existentes de uso de agua para que el líquido sea destinado al uso doméstico y público. 

Diversas partes de México se han visto golpeadas por la falta de agua, lo que ha obligado a las autoridades a ordenar su racionamiento

En un decreto, Conagua detalló que en diversas cuencas del país se ha presentado sequía en sus modalidades de “severa, extrema o excepcional”. Diversas partes de México se han visto golpeadas por la falta de agua, lo que ha obligado a las autoridades a ordenar su racionamiento. 
En Monterrey, la capital industrial del país, miles de personas obtienen el líquido de camiones cisterna mientras las autoridades racionan el suministro. La semana pasada, tras una negociación con autoridades federales, industriales y agricultores acordaron aportar 37 % del agua que necesita la ciudad. 
Las represas de Nuevo León, el estado del norte del país donde se ubica Monterrey, se encuentran en niveles mínimos, una situación que se repite en zonas del estado de Baja California, donde hubo protestas hace semanas en localidades como Ensenada por falta de suministro. 
En algunos sectores de Ciudad de México como Iztapalapa, donde viven 1,8 millones de personas, es común que las autoridades racionen el líquido y envíen camiones cisterna para paliar la escasez. 

Los habitantes de Monterrey se abastecían esta semana de agua en camiones cisterna, luego de un racionamiento decretado por las autoridades ante la fuerte sequía que golpea el norte del país

Los habitantes de Monterrey se abastecían esta semana de agua en camiones cisterna, luego de un racionamiento decretado por las autoridades ante la fuerte sequía que golpea el norte del país. “La situación está muy crítica, la falta del agua nos afecta bastante, más por los niños y la gente mayor”, dijo a la AFP Mercedes Lugo, residente del municipio de Apodaca, que forma parte de la zona metropolitana de Monterrey, de 5,3 millones de habitantes. 
Desde hace más de una semana, los usuarios de esa área tienen servicio seis horas al día, tiempo que deben aprovechar para llenar pozos, tanques y todo tipo de recipientes. El estado de Nuevo León (fronterizo con Estados Unidos) no enfrentaba restricciones de este tipo desde hacía dos décadas. 
Semanas atrás los cortes eran de un día a la semana, pero el estiaje provocado por temperaturas de hasta 42 grados centígrados obligó a endurecer el racionamiento. Ante esa situación, las escuelas de educación básica redujeron los horarios. 
Los universitarios se encuentran en vacaciones. Monterrey, donde varias grandes compañías tienen sus operaciones, es la segunda zona metropolitana más poblada del país, solo detrás del Valle de México, donde viven 21,8 millones de personas.
AFP
CIUDAD DE MÉXICO 

El calor extremo, un riesgo mortal 

Náuseas, desvanecimientos, incluso la muerte. La ola de calor que golpea Europa puso el foco sobre los riesgos de las temperaturas extremas para ciertos trabajadores, lo que llevó a los sindicatos a reclamar mayor protección ante el cambio climático. Difíciles de soportar para la población en general, las temperaturas extremas de los últimos días se han vuelto realmente insufribles para algunos sectores de trabajadores, con tragedias acaecidas en países del sur de Europa.
En España, un empleado de unos cincuenta años murió tras sufrir un golpe de calor, un fenómeno en el que el cuerpo se recalienta, cuando trabajaba en un industria en la región de Madrid. Estas muertes reavivaron el debate en el país sobre el impacto de las olas de calor.
En España, el Reino Unido o Francia, las autoridades han multiplicado los mensajes de prevención. El Instituto Sindical Europeo (Etui) sugirió en un informe considerar como un “riesgo laboral” el “estrés térmico vinculado a las condiciones meteorológicas”. Señal de que se empieza a tomar consciencia, los empleados de los servicios de limpieza de Madrid lograron un acuerdo esta semana para poder dejar de trabajar en horas de más calor.
AFP

Más noticias A fondo

KRISTIE L. EBI - PROJECT SYNDICATE
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO