Ya desde el mes de mayo la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos, NOAA, había dicho que entre junio y noviembre de este año el Atlántico viviría una temporada de posibles huracanes, “por encima” de los años anteriores.
Sin embargo, dependerá de la evolución de la presión, velocidad y dirección de los vientos, así como de la temperatura superficial de las aguas por las que transite, para lograr determinar los posibles cambios en su trayectoria por el país.
“De momento, se puede advertir que no llegará al mar Caribe colombiano como un huracán tan fuerte como lo fue Matthew, que en su tránsito por el territorio marítimo nacional alcanzó las categorías 4 y 5. Por ahora se proyecta que Bret se presente como depresión tropical”, informa el Ideam.
La entidad estima que habrá un incremento en la nubosidad y lluvias en zonas de la costa Caribe, norte de la región Andina e inclusive en algunas áreas del piedemonte de la Orinoquía. De igual forma, es probable un incremento en los vientos y en la altura del oleaje.
Aunque el último informe de monitoreo del Centro Nacional de Huracanes no advierte sobre el arribo del ciclón Bret al archipiélago de San Andrés y Providencia, esta información sólo se podrá saber después del día jueves 22 en horas de la tarde o noche, “con una intensidad incierta”, dice el Ideam.
Comentar