Gratuidad, mejoras en infraestructura, créditos, subsidios de sostenimiento y una amplia oferta de carreras técnicas, tecnológicas y profesionales son algunos aspectos sobre los que está trabajando el Ministerio de Educación con el fin de fortalecer el sistema educativo nacional, pensando en la etapa de posconflicto que puede vivir el país.
Brindar las mismas posibilidades educativas a víctimas y victimarios, pero sobre todo llevar educación de alta calidad a todos los rincones del país, es la apuesta del Plan Especial de Educación Rural.
Este proyecto, que actualmente está en la etapa de construcción, plantea cinco grandes propuestas enfocadas en las zonas rurales que se han visto afectadas por el conflicto armado.
Construir colegios que integren las diferentes sedes de las instituciones en los pueblos, hacer mejoras estructurales a los que existen y construir internados en zonas dispersas es lo que comprende la propuesta de apostarle a la infraestructura educativa como una clave para la calidad.
De acuerdo con las necesidades de cada territorio, se evaluarán y modificarán los componentes curriculares para que se ofrezca una educación incluyente y pertinente.
Este plan rural está siendo diseñado para la educación preescolar, básica, media y superior. Una vez el país exprese su decisión con respecto a la firma de los acuerdos, se espera que para diciembre esté listo y pueda ser socializado, discutido y validado por expertos, representantes de la comunidad educativa y las comunidades rurales que se verán directamente beneficiadas con su implementación. Esta se realizaría a partir del mes de enero del 2017.
Además de la infraestructura y el componente curricular, otro tema importante que incluye el plan es el de los docentes. Y el propósito no solo es capacitarlos y mejorar su nivel educativo, sino garantizar su permanencia en las zonas más alejadas y afectadas por la guerra.
El fortalecimiento de las secretarías de educación de las entidades territoriales certificadas, trabajando de la mano con todo el país, y la elaboración de estrategias que generen un ambiente escolar seguro, promoviendo el colegio como un escenario de paz, también hacen parte de la apuesta por mejorar la educación del campo colombiano.
Educación superiorDesde el pasado 4 de agosto se hizo el lanzamiento de ‘Universidades de Paz’, un proyecto con siete universidades públicas con certificación de alta calidad que llevarán, a partir de este semestre, las carreras más pertinentes para las zonas rurales, a fin de que los estudiantes puedan acceder a ellas e ingresar a la educación superior sin trasladarse a otras ciudades o municipios.
Además, se crearán dos fondos de becas: uno para que víctimas y victimarios tengan acceso a créditos condonables para estudiar carreras técnicas, tecnológicas y universitarias.
El otro brindará subsidios de sostenimiento para aquellas personas que por diferentes condiciones deben trasladarse a municipios y ciudades principales para entrar a la universidad. Podrán acceder a un dinero suficiente para que cubran sus gastos de manutención lejos de la casa.
ANA MARÍA OCORÓ LOZADA
Especial para EL TIEMPO
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