El 15 de julio todos los colegios del país deben retornar a la presencialidad. Y esta vez se trata de una orden nacional derivada de la Resolución 777 del Ministerio de Salud, que se aplica en jardines infantiles, colegios, educación superior y establecimientos del Instituto Colombiano de Bienestar Familar (ICBF).
La medida, que coincide con la fecha en la que se tiene previsto que finalice el esquema de vacunación de profesores, habla de presencialidad y ya no solamente de alternancia (modelo que combina trabajo en casa y en las aulas), lo que significa un paso significativo para la reactivación del sector.
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Esta vez, el proceso se hará con protocolos simplificados que consisten básicamente en uso de tapabocas, distanciamiento de un metro, ventilación, lavado de manos y desinfección. La alternancia solo funcionará en colegios que no puedan garantizar la distancia de un metro.
Con esto se busca acelerar el retorno, que venía siendo muy irregular. En el primer semestre del año, solo el 16,3 por ciento de los 9,7 millones de estudiantes del país han tenido algo de presencialidad, según cifras oficiales recopiladas por el Observatorio de Gestión Educativa de Empresarios por la Educación.
El mensaje que envió el ministro de Salud es que en julio debemos retornar. Consideramos que no es el momento por el estado de la pandemia, pero igual la orden es que debemos volver.
De acuerdo con la ministra de Educación, María Victoria Angulo, la nueva etapa rige para instituciones privadas y públicas, es decir, ningún colegio podrá optar por no volver a las aulas: “El regreso al servicio educativo presencial en las aulas es un mandato ético y normativo, como lo señala la resolución, y se debe adelantar con el cumplimiento del protocolos de bioseguridad en todos los colegios oficiales y privados”, dijo Angulo a EL TIEMPO.
Pese a ello, la decisión de retorno ha recibido reacciones a favor y en contra. Por un lado, se cuestiona el estado de las instituciones. De acuerdo con un informe del Laboratorio de Economía de la Educación de la Universidad Javeriana (LEE), al menos el 11 por ciento de los colegios del sector oficial quedan ubicados en manzanas en las que más de la mitad de las viviendas no tienen acueducto. No es un asunto menor si se tiene en cuenta que 7,8 millones de niños asisten a colegios públicos (más del 80 por ciento).
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El dinero para esas adecuaciones se giró a las secretarías de Educación desde el 2020, pero, a la fecha, de los 400.000 millones de pesos asignados solo se ha ejecutado el 50,1 por ciento.
Este ha sido uno de los puntos en los que ha hecho énfasis la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode). Christian Rey, presidente (e) del sindicato, señaló: “Desde Fecode tenemos dos puntos inamovibles: uno, la vacunación; y dos, contar con los elementos de bioseguridad necesarios. Esto incluye los protocolos actualizados. Por eso, nuestra labor ahora es ver que se cumpla con eso. Así como nos están exigiendo volver, nosotros vamos a exigir que se haga en las condiciones correctas”.
De acuerdo con el directivo sindical, Fecode no se niega a regresar, como otros sectores han señalado: “Los docentes no nos negamos a volver. Están obligando a los maestros a regresar a las aulas. El mensaje que envió el ministro de Salud es que en julio debemos retornar. Consideramos que no es el momento por el estado de la pandemia, pero igual la orden es que debemos volver”.
Las universidades han hecho importantes inversiones para la adecuación de la infraestructura física y tecnológica necesaria para ofrecer a los estudiantes las garantías
Por su parte, Carlos Ballesteros, presidente de la Confederación Nacional de Padres de Familia, asegura que no están dadas las condiciones para el regreso a los salones: “Los colegios no están preparados para retornar, no les ha llegado el dinero para que hagan las adecuaciones y adquirir el equipamiento para cumplir con los protocolos. No vamos a permitir que el Gobierno obligue a las familias al retorno a la presencialidad”.
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Ante esto, la ministra Angulo aseguró que enviar a los estudiantes a las aulas “es una decisión de los padres de familia y, por lo tanto, seguiremos trabajando con un consentimiento. Como sistema educativo debemos seguir respondiendo por la educación de esos menores”.
Con todo esto, la opinión de los expertos es que se hace necesaria la presencialidad, dados los efectos en el aprendizaje y el desarrollo socioemocional de los niños a causa del encierro.
A esto se suman las recomendaciones de Unesco y Unicef, organizaciones que han dicho que los colegios deben ser los primeros en abrir y los últimos en cerrar.
Así lo explica el experto en educación Francisco Cajiao: “Este anuncio es lo mínimo que tiene que suceder. No podemos seguir teniendo 9,7 millones de niños en la ignorancia. Volver a clases es apenas el principio. Ahora viene un ejercicio muy complejo, y es que es necesario indagar en qué condiciones vuelven, sobre todo quienes tienen enormes problemas de conectividad, que en este país son la mayoría”.
Pero ¿está el sector listo para retornar? Si bien tanto colegios como universidades dicen que la presencialidad es necesaria, ven algunos inconvenientes en la aplicación de la resolución.
Por un lado, la Confederación Nacional de Asociaciones y Colegios Privados (Andercop) señaló que aunque se cumpla con los protocolos “plantear el regreso a la presencialidad con un distanciamiento de un metro nos impide el regreso del 100 por ciento de nuestros estudiantes y realmente nos obliga a continuar en plan de alternancia para poder cumplir con esa condición”.
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Por su parte, Óscar Domínguez, director ejecutivo de la Asociación Colombiana de Universidades (Ascún), señaló: “Sería ideal que el Gobierno diera prioridad en la vacunación a los jóvenes, porque todas las personas tienen riesgos de infección”.
Y agregó: “Las universidades han hecho importantes inversiones para la adecuación de la infraestructura física y tecnológica necesaria para ofrecer a los estudiantes las garantías. Pero el crecimiento en la curva del comportamiento de la pandemia evidencia un factor de riesgo que se puede incrementar con el retorno a la presencialidad”.
MATEO CHACÓN ORDUZ
Redacción Educación
En Twitter: @EducaciónET
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