¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Ciencia

El ruso al que un rayo de protones le atravesó la cabeza y sobrevivió

Cuando sucedió, ese acelerador de partículas era el más potente de Rusia.

Cuando sucedió, ese acelerador de partículas era el más potente de Rusia.

Foto:iStock

Sigue siendo un enigma que el científico no haya muerto en ese momento. 

De acuerdo con todas las explicaciones científicas, Anatoli Bugorski, un científico ruso, debió haber muerto el 13 de julio de 1978, cuando su cuerpo fue expuesto a un acelerador de partículas. Sin embargo, está próximo a cumplir 80 años.
Cuando tenía 36 años, Bugorski estaba realizando su tesis en el Instituto de Física de Alta Energía de Protvinó, en Rusia, y tuvo que reparar el Sincrotrón U-70 -un acelerador de partículas que en ese momento era el más potente de Rusia- por lo cual tenía su cabeza muy cerca al aparato.
Fue entonces cuando hubo una falla en los mecanismos de seguridad del acelerador de partículas y un rayo de protones le atravesó la cabeza, entrando por la coronilla y saliendo por la nariz.
La radiación que en ese momento recibió Bugorski en una de las partes más esenciales del cuerpo fue de 2.000 greys, cuando se tiene entendido que con una dosis de 5 greys así de concentrada ya sería suficiente para matar a un ser humano.
Momentos después de lo sucedido, Bugorski negó haber sentido algún tipo de dolor, solo comentó que vio un destello “más brillante que mil soles”, según lo reportó a la revista ‘Discover Magazine’.

¿Qué secuelas tuvo?

El científico fue llevado de manera inmediata a un hospital para ser atendido, pues las posibilidades de que muriera en pocas horas eran prácticamente seguras. Ningún cuerpo humano había sobrevivido a ese nivel de radiación sin tener graves afecciones.
Sin embargo, Bugorski no murió en las próximas horas, ni en los próximos años. El científico sí tuvo algunos problemas debido al accidente, pero nada que no le permitiera continuar con su vida e, incluso, acabar su tesis.
En un comienzo, el lado izquierdo de su cara se hinchó, se ampolló y algunas partes de su piel se desprendieron donde el rayo había llegado con más fuerza. Aunque estos síntomas fueron temporales, Bugorski sí resultó paralizado en la mitad de su rostro hasta el día de hoy.
Además, perdió la audición en el oído izquierdo, pero eso fue transformándose en una forma de tinnitus -término médico para los zumbidos en los oídos cuando no hay una fuente sonora externa-.
Por un tiempo, sufrió convulsiones y fatiga extrema, pero ninguna de estas cosas pasó a causarle mayor dificultad o afectar su coeficiente intelectual.

¿Por qué no murió?

La razón sobre por qué Bugorski sobrevivió aún no es muy clara. Hasta el momento, solo se pueden formular hipótesis con respecto a qué pudo haberlo salvado.
Una de ellas explica que el rayo que atravesó su cabeza era muy estrecho, no ancho, por lo cual pudo no haber afectado un área supremamente fundamental para su funcionamiento diario.
Además, varias investigaciones científicas también han demostrado que el cerebro es un órgano con gran capacidad regenerativa, por lo que incluso es posible que muchos de los daños no hayan sido del todo permanentes.
Actualmente, el científico está cercano a cumplir 80 años.

Actualmente, el científico está cercano a cumplir 80 años.

Foto:iStock

Otra hipótesis que se maneja explica que el tipo de protones que afectó en ese momento a Bugorski es utilizado hoy en día con fines terapéuticos en tratamientos contra el cáncer, por ejemplo.
Se trata de partículas más pesadas que pueden dirigirse de forma específica contra los tumores sin dañar, o con un mínimo daño, a las células sanas de alrededor”, describe ‘Discover Magazine’.
A pesar de estas posibles explicaciones sobre el porqué Bugorski sigue vivo, ambas hipótesis tienen el mismo pero. El nivel de radiación que el científico recibió en el cuerpo, independiente del grosor del rayo o que ahora dosis muchísimo menores sean utilizadas para tratamientos, debería haber dañado a su organismo a tal manera de causarle la muerte de manera casi instantánea.
Su vida, en ese sentido, es un milagro de la ciencia.

¿Dónde está ahora?

A punto de cumplir 80 años, el científico continuó con su carrera, incluso en la misma planta donde tuvo el accidente.
A lo largo de su vida siguió sometiéndose a chequeos constantes por parte de médicos que querían comprender el efecto de ese nivel de radiación en el cuerpo humano.
En cuanto a su vida personal se sabe poco, solo que se casó, tuvo un hijo y por mucho tiempo continuó viviendo en Protvinó.

Más noticias 

Tendencias EL TIEMPO
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO