Hay muchas expectativas ante el lanzamiento el 8 de diciembre de la campaña de Halo Infinite, la nueva entrega de la emblemática franquicia de Xbox. Para llegar a este punto, los jugadores han tenido que esperar un poco más de lo planeado inicialmente y 343 Industries ha tenido que ajustar unas tuercas, luego de que un 'gameplay' dejara un mal sabor de boca entre fanáticos y desatara una ola de críticas y memes por la calidad gráfica que exponía en aquel entonces.
Lejos de esa imagen, Halo Infinite está listo para redimirse con sus aficionados. En EL TIEMPO pudimos acceder a un vistazo preliminar de la campaña y estas son algunas de nuestras primeras impresiones.
Halo Infinite tiene una historia que engancha desde el primer momento con elaboradas escenas cinematográficas que van reconstruyendo los hechos que llevaron al Master Chief a estar suspendido en el espacio, como lo mostraron los primeros tráilers del videojuego.
Para evitar 'spoilers', no daremos detalles sobre el argumento de este nuevo título. Solo diremos que la historia se desarrolla rápidamente y logra integrar dos nuevos personajes que serán claves en las misiones de Jhon-117 en el anillo Zeta.
Halo Infinite se desarrolla en espacios amplios y un mundo abierto, que le permiten a los jugadores optar por explorar o no cada uno de los escenarios. Hablando del anillo, las personas podrán optar por hacer una serie de misiones secundarias rescatando a miembros de la UNSC, por ejemplo, o podrán enfocarse únicamente en las misiones principales.
Para ello, el Master Chief va dotando de nuevas herramientas su armadura con los restos de otros 'Spartans' que han caído en combate. Al final, el jugador cuenta con una amplia variedad de habilidades a su alcance.
Entre ellas están un escudo desplegable, un propulsor para movimientos rápidos, un sensor de enemigos y un escudo repulsor. Integrarlos en combate puede ser difícil en un principio, pues su selección es a través de la cruceta del control. Además, dicho comando se comparte con la selección de los diferentes tipos de granadas.
Sin embargo, una vez aprendida la secuencia de botones, el juego ofrece un gran dinamismo en el combate.
Sobre los gráficos, hay que decir que Halo Infinite ha mejorado notoriamente con ajustes en el diseño de los enemigos y las texturas en general. Además, el cuidado manejo de la luz ofrece atmósferas que logran condensar cada momento de la partida.
Halo Infinite corre a una resolución de 4K y puede alcanzar los 120 fotogramas por segundo en consolas Xbox Series X, en la que también tiene tiempos de carga muy reducidos.