Osvaldo di Campli se posesionó recientemente como nuevo vicepresidente de Nokia para América Latina. El ejecutivo cuenta con más 24 años de experiencia en puestos gerenciales y directivos en la industria de las telecomunicaciones. También se desempeñó como director para América Latina y el Caribe en Alcatel-Lucent.
Di Campli, en entrevista con EL TIEMPO, habló de la importancia de adjudicar el espectro de la banda de 700 MHz y de los retos que afronta la región de cara a la cuarta revolución industrial.
En el país, el sector de telecomunicaciones ha registrado siete trimestres consecutivos con crecimientos negativos. ¿Cuál es su percepción de esta situación?
Latinoamérica es una región considerada emergente, pues las instituciones no están del todo consolidadas. Esto sucede porque buscan saltarse generaciones tecnológicas en el afán de construir algo distinto. En la región, la economía del mercado de telecomunicaciones se ha contraído entre el tres y cuatro por ciento en lo que va del año. Lo que vemos desde Nokia es que ese sector debe generar elementos de riqueza en la parte productiva. Pero, para eso, es necesario reemplazar los modelos de negocios en las industrias que son relevantes para nuestras geografías. Además, es importante cambiar de paradigma y que las industrias trabajen en pro de generar casos de usos para segmentos específicos.
¿Cómo atraer la inversión extranjera?
Colombia, a nivel latinoamericano, ha sido un país que siempre ha estado a la vanguardia de establecer inversiones público-privadas. No hay fórmulas mágicas que logren que un negocio se vaya a desarrollar con fundamento real. Tiene que haber más inversión para construir autopistas digitales y así lograr que el país participe de la cuarta revolución. Es importante explotar mercados no tan explorados con tecnología, pues si utilizamos servicios en la nube, realidad virtual y automatización, podemos lograr que las barreras disminuyan. Yo creo que las inversiones van a estar fomentadas por casos concretos que ayuden a la sociedad como un todo.
Para eso es necesario mayor infraestructura, y el Ministerio TIC anunció que este año no se podrá hacer la subasta de los 700 MHz, una porción del espectro importante para conectar a más personas.
¿Qué opina al respecto?
El espectro se está transformando como un elemento clave, como el agua y la energía. La mayor cantidad de espectro disponible en un mercado debe fomentar la capacidad de conectar al desconectado, y al mismo tiempo monetizar a quienes se conectan, ya sea para fines de entretenimiento o productividad. El espectro de 700 tiene una característica de cobertura muy importante, por eso creo que es deseable que se adjudique a la brevedad.
¿Cómo lograr conectar a los no conectados?
Una de las formas es generando alianzas, infraestructura que se comparta y creando modelos de negocios en los cuales logremos traer a otras industrias para que formen parte del ecosistema. El punto es entender un modelo de negocios que ya no es simplemente un operador satisfaciendo una necesidad de un área no conectada.
Si esa área no está conectada, lo más probable es que no sea un negocio rentable. Por eso, ¿cómo lo hacemos rentable? Probablemente trayendo más jugadores, creando un ecosistema y utilizando al Gobierno como un facilitador de ese aspecto.
¿Qué proyectos está adelantando Nokia en Colombia?
La mayor parte de nuestro negocio está enfocado a los operadores de telecomunicaciones. Teniendo en cuenta que la demanda de los usuarios está creciendo de forma acelerada, los operadores tienen un gran desafío. Parte de nuestra estrategia es trabajar con ellos en hacer más eficiente su operación y monetizar los momentos digitales. Al mismo tiempo, nos estamos enfocando en varias verticales: energía, sector público y ciudades inteligentes.
CAMILO ANDRÉS PEÑA
Redactor de Tecnología @penacamilo