El superintendente nacional de Salud, Norman Julio Muñoz, reaccionó ante la solicitud del procurador general, Fernando Carrillo, de intervenir la EPS Medimás ante las crecientes quejas por parte de los usuarios desde su entrada en funcionamiento el 1.° de agosto.
El funcionario le dijo a EL TIEMPO que su entidad ha estado permanentemente vigilando el actuar de dicha aseguradora e insistió que aunque la situación no ha sido fácil, aún espera entregarle a la Procuraduría todos los resultados de dicho seguimiento para demostrar que no han sido laxos en la vigilancia.
Y en ese sentido, Muñoz manifestó que hablar de intervención en este momento “sería una medida que más allá de solucionar problemas, los empeoraría”, pensando especialmente en la tranquilidad de los usuarios, que “son la esencia de todo este proceso”.
Sin embargo, aseguró que echará mano de otras medidas cautelares que existen para estos casos y así reforzar la supervisión de Medimás, haciendo eco de la solicitud del Procurador.
“Nos hemos centrado en tres puntos específicos: el primero, la oportunidad y la calidad de la atención que reciben los usuarios bajo la premisa de priorizar la atención de todas las personas, pero especialmente aquellas que requieren tratamientos urgentes, que padezcan enfermedades catastróficas o que tengan en este momento procedimientos, intervenciones o asuntos pendientes, sin dejar de lado los demás”, señaló.
Y agregó: “Para esto tenemos un equipo de personas que se ha distribuido en todo el país, pero que se ha centrado en las zonas donde hemos recibido mayores quejas”.
El segundo punto es la consolidación de la red de servicios que, si bien en este momento ya está estructurada en un 60 por ciento, requiere de ajustes en el otro 40 por ciento. “Esto no significa que no exista, porque de parte de la superintendencia en los sitios donde no se ha implantado se mantienen los giros directos a las entidades para garantizar la cobertura. Este es un proceso que ha sido dispendioso, pero que ha sido por buen camino”, indicó.
Y en tercer lugar –dijo– está la fiabilidad y la garantía en la salvaguarda de los recursos. “La EPS ha gastado 250.000 millones de pesos que han sido celosamente vigilados en cuanto a su utilización y se tienen 150.000 millones más disponibles para los cuales la empresa ha tenido que presentar unas pólizas de garantía antes de disponer de ellos”, contó.
Y finalmente, Muñoz afirmó: “Sabemos que la situación no es fácil, sin embargo, mas allá de las entidades y de las empresas, lo que nos interesa es proyectar la tranquilidad a todos los afiliados frente a los cuales cualquier anuncio que se haga debe estar suficientemente soportado antes de promover acciones que puedan afectar la atención de esta población”.
Medimás entró en operaciones el 1.º de agosto de este año y se calcula que tiene 5,6 millones de afiliados, que recibió de la EPS Cafesalud, cuyos activos fueron comprados por el consorcio Prestasalud.
Según dijo el miércoles el Procurador, uno de los puntos más críticos de su operación es que en 27 de los 29 departamentos donde opera no se cuenta con una red de prestadores de servicios.
En un comunicado, la empresa aseguró en la noche del miércoles que "respeta, pero no comparte los pronunciamientos, presentados por el señor procurador Fernando Carrillo", pues a la fecha "viene realizando avances importantes para prestar los servicios a sus afiliados".
"Medimás EPS cuenta con una red de 1.075 Instituciones prestadoras de servicio, que certifican la atención a los usuarios de Medimás, en los 28 departamentos donde nuestra entidad tiene presencia. Adicionalmente, tenemos 35 centros especializados de atención en oncología en toda Colombia, e igualmente contamos con la red de urgencias a nivel nacional", menciona el comunicado.
Y concluye: "Por estas y muchas más razones, solicitamos el acompañamiento de
la misma Procuraduría, para que tenga la información de primera
mano y evidencie los logros que viene realizando Medimás EPS,
para el beneficio de nuestros pacientes".
SALUD