¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Salud

La inmunidad de rebaño está más cerca de lo que parece

Colombia ha aumentado la velocidad de vacunación contra el covid-19, superando los 10 millones de dosis aplicadas. Bogotá es la ciudad que más personas ha inmunizado. fOTO: efe

Colombia ha aumentado la velocidad de vacunación contra el covid-19, superando los 10 millones de dosis aplicadas. Bogotá es la ciudad que más personas ha inmunizado. fOTO: efe

Foto:AFP

El reciente aumento de los suministros de vacunas indica que la solución está a nuestro alcance.

¿Cuánto falta para que esté vacunado el 80 % de la población adulta mundial, el nivel que los científicos suponen necesario para lograr inmunidad colectiva contra el covid-19?
Muchos piensan que será en 2023 o 2024; señal de un enorme pesimismo respecto del avance de la vacunación fuera de los países ricos. Por eso, la promesa reciente del G7 de donar mil millones de dosis a los países pobres entre este año y 2022 puede parecer una oferta generosa y trascendental.
Pero en realidad la situación no es tan desesperante, y el G7 no debería felicitarse antes de tiempo. Manteniendo el ritmo actual, el mundo puede alcanzar la meta de vacunación en enero de 2022. Cualquier acción eficaz empieza por convencerse de que es posible resolver el problema.
Por eso, los miembros de la Comisión Mundial sobre Políticas Pospandémicas, un grupo independiente y apartidario internacional formado por 34 pensadores y hacedores de alto nivel, hicimos algo de matemática, y elaboramos una cuenta regresiva mundial para las vacunas. Para nuestra sorpresa, hallamos que el problema es mucho más manejable de lo que pensábamos, y en un plazo muy inferior al que suponen los gobiernos del G7.
La aritmética es sencilla, pero antes que nada, hay que decidir si se tomará a China (el país más poblado del mundo) como inspiración o excepción. Según Our World in Data, de los 33 a 36 millones de dosis que se administran cada día en todo el mundo, China supone entre 17 y 20 millones.
De modo que con China, la cuenta regresiva llega a cero en poco más de 200 días, y sin ella se alarga a 370 días. Es una diferencia importante, pero aun así, sería alcanzar la meta en julio de 2022 en vez de enero. Incluso si la menor eficacia de las vacunas chinas obligara a subir el objetivo a 90 % de la población, ya estamos casi ahí.
Analicemos las cifras. La población mundial es 7.900 millones de personas, de las cuales alrededor de 5.850 millones son adultas (el 74 %). Si el objetivo es una tasa de inmunización del 80 %, hay que vacunar a 4.700 millones de personas; con un régimen de dos dosis, eso implica 9.400 millones de dosis.
La cantidad de dosis administradas al 11 de junio de 2021 según Our World in Data supera los 2.300 millones; de modo que faltan poco más de siete mil millones de dosis. Dividido por una media de 34 millones de dosis por día, el resultado aproximado es 211 días (enero de 2022).
Claro que siete mil millones es mucho. Pero veamos la situación: China está administrando cada día entre 17 y 20 millones de dosis; la India, poco más de tres millones; e incluso África anda por las 900.000 dosis (37% más que a inicios de este mes).Además, en la mayoría de los países el ritmo de vacunación se está acelerando. No todos los países de ingresos medios podrán vacunar tan rápido como China, pero pueden planteárselo como motivación.

Con China, la cuenta regresiva para la inmunidad colectiva llega a cero en poco más de 200 días, y sin ella se alarga a 370 días. Pero aun así, sería alcanzar la meta en julio de 2022

Hasta hace poco, la principal restricción y causa de frustración fue el suministro insuficiente de vacunas. Pero la producción mundial está en aumento; de las vacunas aprobadas por al menos un organismo regulatorio importante se pasó de 420 millones de dosis por mes en abril a 822 millones en mayo.
Más de la mitad de ese total corresponde a los dos fabricantes chinos de vacunas, Sinovac y Sinopharm (que casi triplicaron la producción, de 164 millones de dosis en abril a 454 millones en mayo). La Unión Europea duplicó la producción de vacunas de Pfizer-BioNTech y Oxford-AstraZeneca, de 69 a 140 millones de dosis; Estados Unidos pasó de 71 a 105 millones de dosis de Pfizer-BioNTech, Moderna y Johnson & Johnson.
Las únicas cifras decepcionantes vienen de la India, donde la producción cayó de 76 millones de dosis en abril a 62,6 millones en mayo.
En los próximos meses, el principal problema no será de provisión de vacunas, sino de financiación y logística, sobre todo en países pobres con deficiencias en infraestructura y cobertura médica. Estos obstáculos se pueden allanar en la medida en que los países ricos liberen la venta de su producción en menos tiempo, y ampliando la financiación bilateral y multilateral destinada a la salud pública y la compra de vacunas.
No nos engañemos: es probable que China tenga un papel importante, e incluso principal, en este proceso. Como mayor productor mundial de vacunas contra el covid-19 (aunque sean de una variedad no tan avanzada como las occidentales), China habrá inmunizado a toda su población más o menos en septiembre, lo cual le dejará una abundante capacidad productiva (y financiera) vacante para proveer al mundo.
Por eso, la promesa del G7, aunque bienvenida, llega con algo de atraso. Los países del grupo están ofreciendo mil millones de dosis según un cronograma que les resulta conveniente, divididas entre fines de 2021 y 2022; pero la demanda de los países pobres y de ingresos medios se hará efectiva mucho antes. Eso da a China una enorme oportunidad comercial y diplomática para llenar el vacío con (tal vez) 500 millones de dosis mensuales en los últimos cuatro meses de 2021.
En tal caso, incluso los cortos plazos que surgen de nuestra cuenta regresiva se podrían abreviar todavía más. Las mayores dificultades se darán en áreas rurales de África y en zonas inestables de América Latina, pero se pueden superar con ayuda de los países ricos (incluida China) y de grandes fundaciones de beneficencia.
Una campaña de vacunación masiva en los países en desarrollo no sería algo nuevo. El éxito depende de la generosidad, de la voluntad política y de creer que la solución es necesaria y posible.
Por la rapidez con que están apareciendo variantes nuevas y la repetición de brotes en lugares que parecían tener el virus controlado, el covid-19 todavía es un problema mundial; y ya deberíamos saber que la solución también tiene que ser mundial. Pero los incrementos de producción recientes y la cuenta regresiva de la Comisión Mundial indican que los recursos necesarios están a nuestro alcance.
BILL EMMOTT*
PROJECT SYNDICATE
* Bill Emmott es ex editor en jefe de ‘The Economist’ y codirector de la Comisión Global para Políticas Pospandémicas.

La necesidad de evitar un ‘apartheid’ vacunatorio

Las cumbres del G7 no suelen dejar en la gente muchos recuerdos aparte de la ‘foto de familia’ de los líderes. Pero en contadas ocasiones, pueden salir de ellas decisiones significativas. Es lo que sucedió en 2009, cuando, en consulta con la dirigencia africana, una reunión del G8 en Italia fue el punto de partida de una nueva época en desarrollo internacional.
Me tocó entonces dar inicio a la sesión, y les conté a los otros líderes allí reunidos la historia de un escolar ruandés atrapado en el genocidio de los años noventa y ahora inmortalizado en el Museo Conmemorativo del Genocidio en Kigali, donde en una sección dedicada a los niños aparece su fotografía, con una placa que dice: ‘David, 11 años; ambición: ser médico; deporte favorito: fútbol; afición: hacer reír a la gente; muerte: por mutilación; últimas palabras: la ONU ya viene a salvarnos”. En su idealismo y en su inocencia, David creyó que la comunidad internacional lo salvaría y salvaría a su madre. Pero no lo hicimos.
Hoy el G7 debe dar un lugar prioritario en su agenda a otra cuestión de vida y muerte, y a los costos de la inacción. Es inaceptable que habiendo vacunas seguras y eficaces contra el covid-19 todavía no tengamos un plan para vacunar a toda la población mundial. Ya han muerto por esta enfermedad 3,8 millones de personas. Cada semana mueren otras 80.000.
Y no es una exageración decir que en las manos de los miembros del G7 está el decidir quién recibirá la vacuna y estará a salvo y quién no la recibirá y seguirá en riesgo. Hace unos días, Estados Unidos ofreció entregar 500 millones de dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech a países en desarrollo, y es posible que amplíe la oferta. Se prevé que el Reino Unido ofrezca cien millones de dosis. Y otros países también harán su parte.
Pero las cifras de las que se hablan están muy lejos de los once mil millones de dosis que se necesitan. Para cumplir la promesa de Johnson de vacunar a toda la población mundial de aquí a que termine 2022, necesitamos un flujo continuo de vacunas en los próximos meses y después.
Eso demanda financiación garantizada y mecanismos de compra conjunta, lo que a su vez lleva a la ampliación de la capacidad productiva y a un cronograma seguro de suministro de vacunas en todos los continentes. Y tenemos que tomar ya mismo una decisión sobre la financiación del plan, para no caer en la situación repetida en la que el mundo no cubrirá los costos y no se conseguirán todos los suministros de vacunación necesarios.

Para cumplir la promesa de Johnson de vacunar a toda la población mundial de aquí a que termine 2022, necesitamos un flujo continuo de vacunas en los próximos meses y después

Los presagios para los países más pobres todavía son desalentadores. La inmensa mayoría de los 2.500 millones de dosis de la vacuna contra el covid-19 producidas hasta el momento se destinó a los países más ricos. África subsahariana recibió menos del 2 %. Por eso, solo al 2 % de la población de la región se le ha aplicado la primera dosis y solo el 0,2% está totalmente inmunizado.
El arzobispo anglicano de Ciudad del Cabo, Thabo Makgoba, lo denomina “apartheid vacunatorio”. Y mientras las tasas de contagio en África aumentan alrededor de un 25 % por semana, los países más pobres del mundo enfrentan dos problemas que tal vez solo el G7 pueda resolver.
En primer lugar, no podrán contener la transmisión de la enfermedad si tienen que esperar hasta que haya dosis sobrantes de los países avanzados (la mayoría de las cuales no llegarán hasta el año entrante). En segundo lugar, no alcanzarán los mismos niveles de inmunización de los países avanzados ni tendrán kits de diagnóstico y equipos de protección individual suficientes sin apoyo financiero adicional: este año se necesitan 16.000 millones de dólares más, y en 2022 se necesitarán más de 30.000 millones de dólares.
Los gobiernos de Noruega y Sudáfrica han propuesto una fórmula para conseguir el dinero necesario, basada en niveles de ingreso y riqueza de cada país y en los diferentes beneficios que les reportaría la reapertura de la economía mundial.
Según sus respectivas capacidades de pago, el G7, junto con Corea del Sur y Australia, debería cubrir el 67 % de los costos. Estados Unidos aportará el 27 %; Europa, el 22 %; el Reino Unido, el 5 % y Japón, el 6 %; a Canadá, Corea del Sur y Australia les corresponde un 2 % cada uno. El resto lo cubrirán otros países del G20, entre ellos China, Rusia y los Estados petroleros.
Pero como dijo Martin Luther King, la posibilidad de llegar demasiado tarde existe. El mundo necesita que el G7 actúe, o se seguirán perdiendo vidas. No podemos permitirnos un apartheid vacunatorio.
GORDON BROWN**
PROJECT SYNDICATE
** Gordon Brown es ex primer ministro y ministro de Hacienda del Reino Unido.
REDACCIÓN DOMINGO

Más noticias: 

icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO