El ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruiz Gómez, anunció que habrá cambios en los lineamientos para definir el aislamiento preventivo ante la pandemia por covid-19.
(Siga leyendo: Ómicron: todo lo que hay que saber sobre la variante dominante de covid-19)
Algunas modificaciones de las medidas preventivas resultan novedosas y sorprendentes, dado el alcance que ha tenido el país en el índice de contagios durante las últimas semanas a raíz de la variante ómicron.
(Además: Considerar a ómicron como una variante leve es un error, según la OMS)
Colombia detectó el 20 de diciembre los primeros tres casos de ómicron, una variante del virus considerada muy contagiosa, aunque no más letal. Tiempo después, el número de contagios se disparó y pasó de rondar los 1.800 casos diarios hasta alcanzar más de 23.000 nuevos contagios esta semana.
(Lea también: Presencialidad en colegios seguirá en firme: Minsalud ante ómicron)
Estudios preliminares sugieren que la variante ómicron tiene consecuencias menos graves entre los infectados a pesar de su rápida propagación, aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que no puede clasificarse como "leve".
En Colombia la mayoría de las medidas restrictivas para contener la pandemia fueron levantadas gradualmente en la segunda mitad de 2021 y las celebraciones de fin de año se convirtieron en un foco de contagio, según expertos.
(De su interés: Estas son las implicaciones de que ómicron sea dominante en el país)
Con una población de 50 millones de habitantes, Colombia suma más de 5,2 millones de contagios y 130.000 muertes por covid-19. Luego de casi dos años de emergencia sanitaria, el país es el tercero con mayor número de casos en Latinoamérica y el cuarto con más fallecidos después de Brasil, México y Perú.
Luis Jorge Hernández, doctor en salud pública y profesor de la Universidad de los Andes, dice que las medidas van en el sentido correcto y asegura que separar el manejo de la pandemia de las pruebas PCR es algo que se debía hacer desde hace mucho tiempo y que el hecho de que el Ministerio considere de una vez por todas la afectación por covid-19 como una infección respiratoria aguda (IRA) debió completarse con todas las acciones que se siguen para estos casos, como son las cualificaciones de las salas IRA en los hospitales, la definición rigurosa de signos de alarma y el seguimiento a la comunidad, esto además de considerar que mantener la decisión de la presencialidad escolar es un gran avance.
Por su parte, Hernando Nieto, salubrista y expresidente de la Asociación Colombiana de Salud Pública, cualifica estas medidas como coyunturales y tomadas casi sin previsión, por lo que insiste en que el país requiere retomar con urgencia la Atención Primaria (AP) que le devuelva al ciudadano la capacidad de acción con autocuidado y medidas de prevención sustentadas de manera técnica, dado que hasta ahora el Gobierno le ha quitado a la población esta posibilidad y la deja expuesta solamente a decisiones que se toman y se definen a través de comunicados y circulares.
(Le recomendamos consultar: Ómicron: todo lo que hay que saber sobre la variante dominante de covid-19)
“Hay que entender que eso es un proceso dinámico que exige la participación de la gente en doble vía”, remata el experto.
A su turno, el exministro de Salud Gabriel Riversos dice que con estas medidas se requiere reforzar la capacidad de asistencia domiciliaria y atención prehospitalaria sin dejar de lado que hay que poner énfasis en componentes regionales y particulares para sitios de concentración de población, dado que la dinámica viral puede afectar más a sitios de residencia, conjuntos y lugares de trabajo con alta concentración.
“Es muy importante definir con claridad los signos de alerta para que la gente los entienda, pero además que se garantice que van a ser atendidos cuando estos lleguen a los hospitales”, remató el experto.

Con una población de 50 millones de habitantes, Colombia suma más de 5,2 millones de contagios y 130.000 muertes por covid-19.
Jaiver Nieto Álvarez / ETCE
A pesar del panorama que se evidencia a raíz del nuevo pico de contagios por covid-19 en el mundo, muchos otros países también han decidido modificar las medidas de contingencia asegurando que es posible disminuir los tiempos de aislamiento y toma de pruebas contra el virus, debido a las altas tasas de vacunación que se han alcanzado a nivel global.
En Colombia, cerca de 28,7 millones de personas han sido vacunadas contra el covid-19 con esquemas completos y unos 3,6 millones ya recibieron una dosis de refuerzo.
(Siga leyendo: OMS minimiza amenaza de variante IHU detectada en Francia)
Pese a la decisión, existen muchas dudas y especulaciones sobre las posibles consecuencias que esta situación podría generar a futuro en el país. Las opiniones encontradas al respecto son múltiples, pero hay que resaltar que la determinación fue previamente estudiada por el Consenso colombiano de atención, diagnóstico y manejo de la infección por covid-19, así como por el grupo asesor epidemiológico del Ministerio, que determinó las nuevas pautas de acuerdo con evidencia científica.
Estas decisiones también se dan en el marco de un cambio global de la situación epidemiológica, teniendo en cuenta los cambios del virus y la respuesta de la población, que determinan la necesidad de adaptar las estrategias al nuevo momento que presenta la pandemia.
En adelante, las personas contagiadas o con síntomas deberán aislarse siete días a partir del primer indicio del virus, en vez de 14 como se recomendaba antes, explicó la cartera de salud.
"No es necesario que se realice una prueba (de covid) dado que la sintomatología ya es una evidencia concluyente de la posibilidad de presencia de una infección por la variante ómicron", añadió el ministro.
(Le puede interesar: Covid-19: reducen el aislamiento en Colombia de 14 a 7 días)
En el caso de las personas asintomáticas que estuvieron en contacto con contagiados, si están vacunadas completamente no están obligadas a hacer aislamiento ni una prueba anticovid, precisó el ministro de Salud, Fernando Ruiz, citado en el comunicado.
Los no vacunados deberán guardar siete días de cuarentena ante cualquier sospecha o confirmación de un contagio. Ruiz pidió "extremar las medidas básicas de bioseguridad, como el uso de tapabocas, y evitar visitar personas más vulnerables".

La sintomatología ya es una evidencia concluyente de la posibilidad de presencia de una infección por la variante ómicron
Vanexa Romero. EL TIEMPO
La razón por la que Colombia y muchos otros países han cambiado los lineamientos de aislamiento y toma de pruebas tiene como premisa dos factores: ( 1 ) la evidencia de que las personas que tienen coronavirus son más contagiosas en los dos días previos a presentar síntomas y en los tres días posteriores, y ( 2 ) el hecho de que la mayoría de los casos nuevos corresponden a la variante ómicron cuya gravedad no es severa, según las últimas investigaciones.
(Le recomendamos leer: Ola de contagios está saturando los sistemas de salud en el mundo, dice OMS)
Además, si un país atraviesa un crecimiento exponencial de casos de covid-19 y todas las personas que se infectan tienen que aislarse o ponerse en cuarentena por largos períodos, el protocolo podría seguir poniendo en riesgo la supervivencia de empresas, comercios y aerolíneas, así como la disponibilidad de personal en los hospitales.
Cuando Estados Unidos redujo los tiempos de aislamiento, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), argumentaron que el cambio estaba motivado por el hecho de que la ciencia corroboraba que la transmisión del virus se produce en los dos días previos a los síntomas y en los 2-3 días posteriores. "Por lo tanto, las personas que dan positivo en la prueba pueden aislarse por menos tiempo si son asintomáticas”, afirmaron.
Por otro lado, los datos sobre las tasas de vacunación y su efecto en la reducción de enfermedad grave, hospitalización y muerte son positivos. Los estudios demuestran que la eficacia de la vacuna ARNm, con esquema completo, contra la infección es de aproximadamente el 35 %. Una dosis de refuerzo de la vacuna restaura la efectividad contra la infección en un 75 %.
(Además: Colombia tiene 44,35 % de disponibilidad de camas UCI)
A pesar de estos argumentos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) registró una nueva cifra récord de 2,6 millones de casos y asegura que la curva de contagios continúa su ascenso exponencial. El actual récord casi triplica el de abril de 2021, que tuvo 900.000 casos atribuidos al auge de la variante delta.
-Los departamentos de Colombia donde ya circula la variante ómicron
-Aumento de casos de ómicron podría crear variantes más peligrosas, dice OMS