El jefe de la misión de la ONU en Colombia, Jean Arnault, en su informe presentado ante el Consejo de Seguridad de ese organismo, este viernes, dijo que en las próximas semanas evacuarán al menos 380 caletas con armas de las Farc.
Además, señaló que ya van 81 caletas evacuadas, de 949 que esa organización ha reportado. De este modo, en menos de una semana, pasó de haber evacuado 77 caletas a ese número reportado hoy desde la sede de la ONU en Nueva York.
“Hasta el momento se han extraído 81 caletas de armas y destruido una gran cantidad de explosivos. Actualmente se está planificando con las Farc y el Gobierno la extracción de otras 380 en las próximas semanas, con más por seguir”, dijo el francés Arnault.
En su balance, Arnault dijo que ya habiéndose almacenado todas las armas individuales de los excombatientes que están en las 26 zonas veredales, la Misión de la ONU, con ayuda de las Farc, “puede dedicar toda su atención a la eliminación de cientos de caletas de armas, la extracción de armas que en ellas se encuentran, y la destrucción de explosivos y armamento inestable”.
“La eliminación de las caletas es, sin duda, un proceso difícil, pero nos alienta la voluntad de las Farc y de las Fuerzas Armadas de avanzar y estamos seguros de que si no todas, al menos un alto porcentaje de las caletas puedan ser evacuadas a más tardar el 1 de septiembre, la fecha en que finalizará la verificación por la Misión de las caletas y la responsabilidad pasará a manos del Gobierno”, anotó Arnault.
El jefe de la misión de la ONU en el país también señaló que con la dejación definitiva de las armas de las Farc, en el acto del martes en Mesetas, “se ha consolidado el cese del fuego”.
Aun así indicó que será importante que el Mecanismo Tripartito, encargado de monitorear el cese del fuego, siga funcionando durante algún tiempo después de que las actuales zonas y puntos veredales desaparezcan, el 1° de agosto.
“Ha sido una herramienta eficaz (el mecanismo conformado la ONU, el Gobierno y las Farc) para mantener y fortalecer la confianza entre las partes en el conflicto. Y su presencia a nivel local ayudará a asegurar que los incidentes que puedan ocurrir en las próximas semanas y meses pueden continuar siendo tratados cooperativamente”, explicó Arnault, quien recomendó aplicar ese mecanismo en otros proceso de paz, por su utilidad y eficacia probada en el de Colombia.
La intervención de Arnault ante el Consejo de Seguridad no estuvo exenta de advertir los desafíos y dificultades que vive la implementación del acuerdo de paz de La Habana entre el Gobierno y las Farc.
“El primer y más urgente desafío es la reintegración de los 10.000 combatientes y milicianos de las Farc, entre los cuales ahora existe un profundo sentimiento de incertidumbre en cuanto a su seguridad física tras el desarme y su futuro socioeconómico”, dijo y agregó que se requiere un esfuerzo por tratarse de un proceso en un contexto de economías ilícitas.
“Más allá de la reintegración de los combatientes, el proceso de paz también debe responder a las necesidades y expectativas de los sectores más vulnerables de la sociedad colombiana. Estamos totalmente de acuerdo con las tres esferas prioritarias identificadas por el Gobierno: el despliegue de las fuerzas de seguridad para proteger a las comunidades y establecer el estado de derecho en las zonas más afectadas por la guerra; la movilización de las instituciones nacionales y locales para llevar bienes y servicios a las zonas rurales más allá de su alcance y el pronto funcionamiento de la nueva jurisdicción de paz para cumplir la promesa de hacer justicia a las víctimas del conflicto”, finalizó.
El Consejo de Seguridad está tramitando la solicitud que recibió de parte del presidente Juan Manuel Santos al Secretario General de la ONU y a la Presidencia del Consejo de Seguridad, el pasado 5 de junio.
Esa instancia responderá próximamente a través de una Resolución, tal como ocurrió en el pasado con la primera solicitud de tener una Misión de la ONU, que fue avalada en enero del 2016 y que terminará oficialmente el 26 de septiembre.
Para Arnault, esa solicitud “honra” las labores desempeñadas por ese organismo.
UNIDAD DE PAZ
