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Proceso de Paz

Homicidios de familiares de ex-Farc, otra amenaza al proceso de paz

Este año han sido asesinados más de 60 desmovilizados de las Farc.

Este año han sido asesinados más de 60 desmovilizados de las Farc.

Foto:AFP

Según la Fiscalía General, 41 familiares de desmovilizados fueron asesinados desde 2017.

Samuel David solo tenía siete meses, y lo mataron porque su padre era exguerrillero de las Farc. El bebé, que no alcanzó a pronunciar sus primeras palabras, era considerado un hijo de la paz, pues había nacido en el antiguo Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) de Tierra Grata, en Cesar, adonde sus padres llegaron en medio del proceso de paz.
Todo iba bien hasta esa madrugada de mediados de abril del 2019, cuando un grupo de hombres armados llegaron hasta el corregimiento de El Carretal, en La Guajira venezolana, y dispararon contra las viviendas de la ranchería donde se encontraba descansando la familia.
Samuel David murió desangrado camino al hospital. Sus padres, Enrique González, quien perteneció al bloque Caribe de las Farc, y Sandra Pushaina, de ascendencia indígena, resultaron heridos.
Con su corta vida, Samuel nos deja reflexiones sobre las contradicciones de estos tiempos. Nacer como símbolo de esperanza de la construcción de paz y morir asesinado para recordarnos que las condiciones de convivencia están distantes aún, en medio de un orden social en plena decadencia”, dijeron desde Tierra Grata al lamentar el homicidio y exigir garantías de seguridad para los excombatientes y sus familiares.
En la noche del lunes 24 de abril del 2017 fueron encontrados los cuerpos sin vida de Kellys Henao, de 20 años de edad; Alberto Osorio, de 33, y Marcela Osorio, de 14, en una vivienda del barrio María Gaín, en Tarazá, Antioquia. Los cuerpos, informó Farc en su momento, “fueron brutalmente masacrados”.
Quienes sobrevivieron señalaron como responsables a los grupos paramilitares que operan en el bajo Cauca antioqueño, los cuales, contaron los testigos, dijeron que “hasta que no terminaran de matar a toda esa familia no paraban”.

Nos llama la atención es el silencio del Gobierno, ese silencio que mantiene, que no dice nada

¿Por qué los mataron? Todo indica que porque eran familiares de un desmovilizado que se encontraba en la Zona Veredal Transitoria de Normalización Juan Carlos Castañeda.
Pero estos casos no son los únicos registrados hasta el momento. A la ya problemática situación por los homicidios de desmovilizados de las Farc, que en cuentas de Naciones Unidas suman 179 desde la firma del acuerdo de paz, se suman las muertes de sus familiares.
Según las cuentas de la Unidad Especial de Investigación de la Fiscalía, dirigida por la fiscal Martha Janeth Mancera, a corte del 31 de diciembre del 2019, fueron asesinados 41 familiares de desmovilizados.
En 2017 se registraron 15 casos, 11 en 2018 y 15 el año pasado. De estos, 22 han sido esclarecidos por las autoridades, siendo las disidencias las principales responsables, con seis homicidios.
A estos grupos les siguen el ‘clan del Golfo’, con seis; delincuencia común, con tres; particulares, con tres; el Epl, con dos, y la Fuerza Pública, con dos homicidios.
De acuerdo con la senadora por el partido Farc Sandra Ramírez, en varias oportunidades le han exigido al Gobierno Nacional que cumpla con las garantías de seguridad para los excombatientes y la comunidad en general, entre quienes están los familiares de los exguerrilleros.
Esto, dijo, se pactó en el tercer punto del acuerdo de paz. Mientras esto no suceda, seguirán los homicidios y las desapariciones, agregó.
La congresista comentó que, además de las garantías de seguridad, es necesario que avancen las investigaciones de la Fiscalía “y que se le diga a la Nación entera quiénes están detrás de esos asesinatos, y el porqué”.
“Nos dicen que son las ‘Águilas Negras’, ¿Quiénes son? ¿Dónde están? ¿No tienen un cuerpo de mando? Son un fantasma que hace muchísimo daño”, aseveró.
“Pero lo que sí nos llama la atención es el silencio del Gobierno, ese silencio que mantiene, que no dice nada”, puntualizó la congresista, quien es la vocera del partido para este año legislativo. Entre las principales preocupaciones de los miembros del partido Farc y los defensores del acuerdo está que los crímenes contra familiares también aumentaron, así como los de los excombatientes.
Así las cosas, el 2019 no solo fue el año “más violento” para quienes decidieron dejar las armas y reincorporarse a la vida civil, como lo afirmó la Misión de Verificación de la ONU en su último informe –presentado hace un par de semanas–, sino que también lo fue para sus familiares.
POLÍTICA
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