Cuando el presidente Juan Manuel Santos invitó, hace dos meses, a su antecesor Álvaro Uribe a un cara a cara para hablar del tema de la paz, la respuesta del hoy senador fue negativa. Y ahora que Uribe es quien se muestra dispuesto a ir a un debate con Santos sobre el plebiscito, el jefe del Estado es quien esta vez se niega.
Esa puede ser la síntesis de la novela política que ejemplifica su profundo desencuentro.
El primer intento de concretar un encuentro se dio el pasado 12 de julio, cuando Santos envió una carta a Uribe invitándolo a hablar del tema.
“Parecería inútil invitar a un diálogo para notificar lo resuelto”, fue la respuesta de Uribe a Santos a través de un trino.
Las últimas semanas, cuando ya se había dado un acuerdo final, el uribismo comenzó a retar a Santos a un debate. Uribe mismo lo pidió, pero sugirió que Santos se sentara con sus tres precandidatos a debatir sobre el acuerdo, no con él. La última semana, él ha sido aún más insistente.
“Es necesario y fundamental (...) que usted como principal responsable de lo acordado en Cuba acepte debatir cara a cara y públicamente con el presidente Uribe, cabeza de la oposición”, dice Macías en la carta dirigida al primer mandatario. Y agrega: “Debo manifestarle que el presidente Álvaro Uribe está listo y dispuesto a participar en el debate”.
El secretario general de la Presidencia, Luis Guillermo Vélez, descartó el debate con Santos: “Los representantes del Centro Democrático y el mismo senador Álvaro Uribe declinaron estas invitaciones” en varias ocasiones. No habrá debate.
POLÍTICA
20 de septiembre 2016, 11:28 P. M.
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Redacción EL TIEMPO20 de septiembre 2016, 11:28 P. M.