El vicepresidente Óscar Naranjo visitó este viernes Tumaco, Nariño, para entregar cuentas de sus compromisos con esa población, pero se encontró con el asesinato de Víctor Segundo Castillo, un líder social que trabajaba para que los jóvenes abandonaran actividades delincuenciales.
Castillo había logrado que más de 120 jóvenes se incorporaran a actividades productivas.
El líder social fue asesinado la noche del jueves, cuando regresaba a su vivienda. Este viernes, Naranjo visitó a Janeth Castañeda, esposa del dirigente social asesinado, la abrazó y le dio consuelo.
El Vicepresidente se reunió con líderes de organizaciones sociales empeñados en la recuperación del puerto y les explicó cómo funcionará el Centro Integrado para la Inclusión Social y la Convivencia.
Desde la próxima semana, esta instancia atenderá a la ciudadanía de Tumaco en lo que tiene que ver con asuntos del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), la Unidad de Víctimas, la Agencia de Reincorporación, la Unidad Nacional de Protección, Coldeportes y la Consejería para la Defensa de los Derechos Humanos de la Presidencia. Se unirá la alcaldía local.
Por encargo del Presidente de la República, el Vicepresidente tiene tres frentes de acción: defensa de los líderes sociales, seguridad e implementación del acuerdo de paz.
Y, según dijo, la comunidad de Tumaco sí que requiere de su ayuda en todos esos campos.
El Vicepresidente ofreció fortalecer el sistema de recompensas en el puerto como uno de los instrumentos para luchar contra el crimen.
La próxima semana se iniciará allí una fase de acuerdos voluntarios colectivos e individuales con 1.400 familias que se comprometerán a sustituir 1.500 hectáreas de cultivos ilícitos en 21 veredas.
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