El presidente Juan Manuel Santos dejó en claro este sábado que no está de acuerdo con la propuesta de habilitar el voto para los jóvenes a partir de los 16 años, ni con la del voto obligatorio. Tampoco es partidario de la idea de aprobar que los ciudadanos puedan proponer leyes prioritarias por vía digital.
Estos tres temas, a los que Santos se opone, forman parte de una macrorreforma política anunciada esta semana por el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo.
El Presidente hizo saber que no está de acuerdo con estas iniciativas, entre otras razones porque cree que no se debe “abusar del ‘fast track’ ”, el procedimiento legislativo especial habilitado para desarrollar el acuerdo de paz en el Congreso.
Por mandato constitucional, el Legislativo fue habilitado para aprobar leyes y reformas a la Carta de manera más rápida que en el proceso ordinario, siempre y cuando tengan que ver con el proceso de paz. De ahí el temor del mandatario de que se utilice este procedimiento legislativo extraordinario para tramitar leyes o reformas constitucionales que no tienen esa naturaleza.
Según fuentes de Palacio, el Jefe de Estado no fue consultado por su ministro sobre estos puntos. De hecho, en charlas con algunos líderes de partidos, el jefe del Ejecutivo bromeó diciendo que “son algunos ‘miquitos’ del ministro Cristo”.
No obstante, aun cuando Santos no comparte la idea de desarrollar leyes sobre estos temas trascendió que no le incomoda para nada el debate sobre los mismos.
El debate sobre la reforma política no comenzó con pie de derecho. La manera como el ministro Cristo hizo el anuncio de la macrorreforma el miércoles no cayó bien en todos los sectores políticos, pues varios de ellos lo vieron y lo calificaron como inoportuno.
El Presidente y su ministro del Interior se reunieron el jueves en la Casa de Nariño con los líderes de los partidos de la coalición y allí fueron varias las voces que advirtieron de su inconveniencia.
En todo caso, la propuesta de Cristo involucra cerca de ocho temas, entre reformas de ley y reformas constitucionales, algunas de las cuales sí tienen el respaldo del mandatario y de las colectividades que lo acompañan.
Para este lunes está previsto que se haga una primera mesa de trabajo con los dirigentes de los partidos, a fin de examinar cuáles proyectos irán al Congreso ahora y cuáles no.
Una de las primeras incertidumbres que habría que resolver es si las propuestas que planteó Cristo, las cuales algunos califican como una cortina de humo, se pueden tramitar dentro de la vía rápida o ‘fast track’.
Asuntos como las listas cerradas a corporaciones públicas o financiación estatal de campañas no tendrían demasiados inconvenientes para ser introducidos en la reforma al sistema electoral que se acordó en La Habana.
Pero la ampliación del periodo presidencial a cinco años, la eliminación de la Vicepresidencia o el cambio a la circunscripción de Senado son asuntos en los que no parece haber la misma claridad.
De todas maneras, ante la inminencia de la campaña para el 2018, algunas de estas modificaciones parecen no tener mucho apoyo por parte de los partidos políticos.
POLÍTICA
Comentar