El informe anual de la oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas, presentado este jueves plantea un desafío en plena implementación de los acuerdos de paz con las Farc. Indica que el 73 por ciento de los asesinatos de defensores de derechos humanos en el 2016 ocurrieron en zonas rurales, muchas de las cuales fueron abandonadas por esa guerrilla.
Según la ONU, el año pasado hubo 389 ataques a líderes sociales, de los cuales 59 fueron homicidios.
Una de las mayores preocupaciones del organismo es el aumento de asesinatos de defensores de derechos humanos en las zonas rurales. Mientras en el 2015 se registraron 25, el año pasado fueron 44.
De acuerdo con el informe, el aumento se debe “a los vacíos de poder que han dejado las Farc, la escasa o débil presencia del Estado y la estigmatización a defensores de derechos humanos”.
Ahí hay un diagnóstico claro, hay una comisión de seguridad que está surgiendo
Señala que el 73 por ciento de los perpetradores de los asesinatos estarían vinculados con intereses criminales.
Por eso, la ONU “recomienda” que el Ministerio del Interior, la Fiscalía, la Policía, la Unidad Nacional de Protección y las autoridades regionales y locales “cumplan de manera articulada”, con la prevención y protección de los defensores y que esos crímenes sean investigados.
Sobre este hecho, el ministro del Interior Juan Fernando Cristo aseguró que el Gobierno Nacional va a avanzar “en el control institucional para evitar que se sigan presentando esos asesinatos. Ahí hay un diagnóstico claro, hay una comisión de seguridad que está surgiendo”, enfatizó el funcionario.
Así mismo, el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, indicó que con los asesinatos de líderes no se ha podido comprobar que haya "sistematicidad alguna".
Y agregó que ya tienen "56 capturados. 50 imputaciones, y de las 11 personas cuyas órdenes de captura estaban pendientes el pasado viernes, ya no quedan sino cuatro por ejecutarse".
Comentar