¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Política

La confusión por las diferencias entre Duque y Claudia López

El presidente Iván Duque y la alcaldesa Claudia López, revisando medidas económicas para Bogotá

El presidente Iván Duque y la alcaldesa Claudia López, revisando medidas económicas para Bogotá

Foto:Presidencia

Los riesgos por la ausencia de una estrategia común entre Presidente y la alcaldesa. Análisis.

Armando Neira
A escasos cuatro días para que en Colombia vuelvan al trabajo, con medidas de bioseguridad, los sectores manufacturero y de la construcción en Bogotá reina la incertidumbre.
Las dudas son tan grandes como evidente el distanciamiento entre el presidente Iván Duque y la alcaldesa mayor, Claudia López. El cruce de decisiones entre ambos ha creado un inquietante escenario en la capital, que tiene casi ocho millones de habitantes y es la urbe más afectada por los contagios de covid-19. De los 4.356 casos confirmados en el país, en Bogotá hay 1.836.
El último capítulo de este choque se dio con el anuncio del Gobierno Nacional de permitir el regreso a sus labores de 4 millones de personas de los sectores de manufacturas y construcción.
La alcaldesa le salió al paso por los riesgos que conlleva la movilidad de tantos empleados. Según sus cuentas, serían 1’127.000 viajes diarios, lo que “dispararía el riesgo de salud de los trabajadores” por la “aglomeración en transporte”.
En la víspera, el Presidente, sin mencionarla, se refirió a la frase de la mandataria según la cual el aeropuerto El Dorado solo se reabriría el 27 de abril sobre su “cuerpo muerto”.
Al respecto, Duque dijo: “Hay que salir de la discusión de echarle la culpa al aeropuerto. La pandemia está sacudiendo al mundo y no veo a nadie en Estados Unidos echándole la culpa al aeropuerto John F. Kennedy”.
El ejemplo ilustra el grado de sensibilidad que hay entre ambos. En realidad, Duque nunca había dicho que iba a abrir el aeropuerto. Por el contrario, reiteró, varias veces, que no había ninguna posibilidad de reiniciar operaciones internacionales. Y las nacionales, confirmó la semana pasada, siguen en evaluación.
Pero ¿por qué se llegó a esta situación? León Valencia, director de la Fundación Paz y Reconciliación, un centro de análisis político, cree que “en la disyuntiva entre proteger la vida y la salud o proteger la economía, Claudia decidió priorizar la vida y la salud sin descuidar la producción y la economía; en cambio, Duque ha puesto al mismo nivel los dos factores”.
Luis Felipe Henao, exministro de Vivienda de la administración Santos, tiene una lectura distinta. Considera que el proceder de la alcaldesa no es sano. “Pienso que Claudia no está actuando éticamente en su relación con el Gobierno. Está privilegiando intereses personales sin importar que los mismos envíen a la ciudadanía un mensaje de incertidumbre”.
"Sus declaraciones grandilocuentes –agrega Henao– están llevando a que pequeños y medianos empresarios tomen la decisión de despedir masivamente sus trabajadores; la situación de hambre y desasosiego crecerá".
Algunos observadores políticos ven un pulso por el liderazgo en el manejo de la pandemia. De hecho, ella fue quien decidió la primera cuarentena, con un simulacro, durante el puente festivo del 21 de marzo.
Este, aunque fue concebido como un ejercicio pedagógico y de autorregulación de la ciudadanía, fue de obligatorio cumplimiento e incluía sanciones. Muchos la aplaudieron por su iniciativa porque vieron en ella la capacidad para toma de decisiones. Duque, entonces, reaccionó e impuso la cuarentena nacional, respaldada por López.
A medida que aumentó el número de casos confirmados, con las cifras de muertos en ascenso y con el grave deterioro de la economía, la relación entre ambos se volvió a tensar.
Carlos Arias, consultor en comunicación política y persuasión, ve que la crispación se alimenta por las características de personalidad política de los dos tipos de liderazgo. “Mientras en la alcaldía siempre ha habido un único vocero con un discurso directo, en la Presidencia hay un liderazgo mediado ocasionalmente por ministros y asesores que han terminado en dobles, como se vio en la desautorización a Carrasquilla sobre una reforma tributaria”.
Para el analista político Pedro Viveros, es urgente que la comunicación fluya más entre ambos. “Ojalá vuelva la Claudia colaboradora y moderna que conocemos y no la que grita en 280 caracteres por Twitter. Con caminar 200 pasos al sur del Palacio Liévano, ella puede hablar cara a cara con el jefe de Estado”, dice.
ARMANDO NEIRA
EDITOR DE POLÍTICA DE EL TIEMPO
@armandoneira
Armando Neira
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO