27 años después de haber entregado las armas como dirigente del M-19, Antonio Navarro Wolff asistió este martes a Mesetas (Meta) para testimoniar el fin de las Farc como movimiento guerrillero. Esta vez Navarro tuvo que remontar pantanos apoyado en sus muletas.

Horacio Serpa, codirector del Partido Liberal, parece pensarlo dos veces antes de dar el paso para llegar a la tarima donde los guerrilleros de las Farc hicieron dejación de sus últimas armas, por culpa de sus zapatos, más adecuados para caminar por el Capitolio.

El que sí  fue muy preparado y llevó unas botas de campaña  fue el secretario general de la Presidencia Alfonso Prada. Como que no le importaba embarrarse. 

El presidente del Partido Conservador,  Hernán Andrade, lucía bastante despeinado y fatigado por el calor, pero él es uno de los grandes defensores del proceso de paz con las Farc, hecho que le ha generado unas cuántas críticas desde las filas de su partido.  

El embajador noruego Johan Christopher (camisa azul) tuvo  suert, pues se pudo trepar en el platón de una camioneta para sobrepasar los lodazales.  

Muy cómodo resultó el viaje para el senador conservador (ventana trasera, con gafas oscuaras) Efraín Cepeda, otro de los defensores del proceso de paz con las Farc.