¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Reclutamiento forzado y covid-19

El difícil acceso a la educación virtual deja a los niños como presa para las estructuras criminales

En tiempos de pandemia, a los grupos criminales se les han alineado los astros. Mientras el Estado se encuentra preocupado por prevenir los contagios, los grupos armados entienden sus debilidades y aprovechan la emergencia sanitaria para maximizar sus acciones.
El Eln, disidencias de las Farc y grupúsculos criminales han aprovechado la situación de emergencia para aumentar su número de integrantes e irradiar los espacios vacíos en el territorio colombiano. La relación entre la pandemia, el reclutamiento de menores y los grupos criminales está en la convergencia sobre la población rural. En las áreas geográficas del Valle del Cuca, Cauca, Nariño, Chocó, Catatumbo y Arauca se encuentran las más alarmantes cifras de reclutamiento de menores. El difícil acceso a la educación virtual en medio de la pandemia deja a los niños como la presa más apetitosa para las estructuras criminales.
El 23 de marzo, Iván Duque decretó el estado de emergencia y ordenó la cuarentena nacional, simultáneamente el Eln declaró un cese del fuego unilateral por 30 días. Lo anterior no excluyó la actividad ilegal de reclutar menores. Desde enero hasta mayo de 2020 ha habido 45 eventos de reclutamiento, sumando 128 menores reclutados en total. Se registró un aumento del 113 por ciento en comparación con el 2019, y en plena cuarentena las denuncias reportaron 31 casos solo del Eln.
Aquellos menores reclutados poseen en común la falta de acceso a internet, cierre de sus escuelas y ser habitantes de regiones marginales. En aquellas zonas de Colombia se disputan legitimidades legales con legitimidades ilegales, estas últimas establecen gobernanzas criminales.
Las organizaciones criminales ofrecen incentivos como dinero y ascenso en estructuras ilegales por actividades tales como raspar la hoja de coca, cobrar extorsiones, portar armas, ser informantes, mensajeros entre integrantes y esclavitud sexual.

Gobernanzas criminales

La violencia es tan viral como la covid-19, y es dicha velocidad la que convierte el reclutamiento forzado en un nuevo desafío para la seguridad nacional. Los grupos armados han elaborado estructuras sociales subterráneas que socavan el Estado de derecho y la gobernanza convencional.
Aquellos actores en Colombia han tejido patrones de comportamiento y modos de vida en zonas periféricas, así como entablado relaciones de poder con las comunidades. Para eso, se han valido de estrategias no militares como la justicia paralela, finanzas subterráneas, control territorial y hasta diplomacia criminal con grupos de la región, en especial mexicanos. Estos grupos controlan las actividades tanto legales como ilegales, declaran toques de queda emulando autoridad soberana y controlan el libre tránsito de personas.

¿Para qué reclutar menores en tiempos de contagio?

Los grupos armados necesitan reclutar menores para demostrar que no son simples delincuentes. La pandemia es un escenario estratégico para medir su impacto en las comunidades y territorios donde hacen presencia, les permite tener una noción sobre su papel en la agenda del gobierno y así mismo a escalar rápidamente en el nivel de prioridades por si el gobierno decide formar una mesa de negociación.
Lastimosamente, la pandemia dejará débil y en recesión al Estado, mientras que servirá de tanque de oxígeno para los grupos criminales. La clave de la situación entonces es entender que el reclutamiento se puede evitar cuando se comprenden las causas subyacentes que lo provocan. El reclutamiento no es consecuencia de presencia criminal, pero sí es resultado de la cultura violenta, la falta de oportunidades, la constante tensión entre la gobernanza legal y la gobernanza criminal.
César Niño
Profesor y analista político
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO

Más de Redacción