El empleo es la prioridad
No se puede esperar que las decisiones vengan sólo de los gobiernos. Deben ser de toda la sociedad.

Aún siendo de pensamientos distintos conversemos con buenas intenciones y buscando el bien común.
Ahora que los países están pensando en defender lo suyo, sería inaceptable no defender lo nuestro.
No se había decidido, como colectivo, asumir efectos económicos tan altos ante ninguna situación.
No hay duda de que el gran problema es la liquidez de las personas, los Estados y las empresas.
El Congreso está en su capacidad de ejercer sin responder a incentivos clientelistas, o ‘mermelada’.
El proyecto contiene prácticamente todas las recomendaciones de la Comisión de Expertos y la Ocde.
Para progresar en lo social debemos cambiar nuestra mentalidad frente al crecimiento económico.
Estamos sometidos a una sobredosis de política, todas las sobredosis hacen gran daño.