¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

¿Qué nos dejó el paro?

¿Qué nos queda? Atender las peticiones de los jóvenes y llenarnos de valor y esperanza.

Termino hoy mis reflexiones sobre el paro. El momento escogido para realizarlo fue el peor, y eso lo descalifica en gran medida. Los centenares de muertos causados por el virus en las aglomeraciones acusan ante la historia a los promotores y dejan mal parados a los líderes de los sindicatos por las 104 desmedidas pretensiones iniciales y a Fecode porque, al parecer, lo que pretendían era tumbar al Gobierno y lograron quebrar la economía del país.
¿Cómo desmontar la desconfianza que los jóvenes demuestran por las instituciones, por los partidos políticos y por los legisladores? ¿Cómo acabar con la corrupción, que a todos los colombianos nos tiene asqueados? Queda la urgencia de atender las peticiones de los jóvenes en estos aspectos: educación, salud, empleo, arte y cultura, deporte y medio ambiente, entre otros. Está presente el recuerdo de los jóvenes de la séptima papeleta que con sus marchas ordenadas y alegres lograron, entre otras cosas, forjar una nueva constitución.
Yo pediría menos palmaditas a los médicos, enfermeras y todo el cuerpo sanitario, por su heroica labor. Ellos se merecen, más que otros, los 32 millones mensuales de sueldo. Ellos son la verdadera primera línea de la vida. Lo mínimo que se puede pedir es que se les pague su salario a tiempo.
Mauricio Botero publicó algunos “escolios” del tal vez mayor pensador de Colombia, Nicolás Gómez Dávila: “Un socialismo con cara humana es un aguardiente sin alcohol”. “Al pueblo no lo elogia sino el que se propone venderle algo o robarle algo”. “Los asesinatos políticos son lícitos hoy siempre que el asesino sea de izquierda”. “El joven se enorgullece de su juventud como si no fuera privilegio que tuvo hasta el más bobo”.
“El capitalismo es abominable porque logra la prosperidad repugnante vanamente prometida por el socialismo que lo odia”. “El acto de despojar de sus bienes a un individuo se llama robo cuando otro individuo lo despoja y justicia social cuando una colectividad entera lo roba”. “Se acostumbra pregonar derechos para poder violar deberes”.
Este paro nos dejó heridas profundamente el alma y la nacionalidad con horrores que nunca podremos olvidar y que nos catapultan ante las naciones del mundo como un país de cafres, por culpa de unos cuantos. Estos son algunos: ver policías disparando a la multitud, ver incendiado el sistema de trasporte público de varias ciudades, ver vándalos destruyendo con rabia cuanto encontraban a su paso.
Pero hay más todavía, algunos actos ante los cuales el Marqués de Sade resulta un inocente juguetón y que nos recuerdan los horrores nazis. El solo hecho de escribirlos horroriza. Por ejemplo: el patrullero al que se le propinaron 3 disparos, 30 puñaladas y lo quemaron con ácido; el policía con la cara ardiendo en llamas; la furia de los vándalos tratando de achicharrar a 15 policías dentro de un CAI incendiado; las cínicas declaraciones de la oficina de comunicaciones de Petro: “El bebé habría muerto igual”.
Eran dos esposos que trataron en vano 7 años de tener un hijo, lo lograron y por un bloqueo murió el niño. Hubo otro bebé que murió en las mismas circunstancias. Señor Petro, ¿cómo votar por usted si su gente parece no tener corazón?
Sigo con los horrores: la concejala Heidy que con sus fake news propició que atacaran las ambulancias médicas. Creo que también es petrista. ¿Qué pensar de los jueces que declaran libres a casi todos los vándalos?
¿Qué nos queda? Atender las peticiones de los jóvenes y llenarnos de valor y esperanza. Colombia es un país de gentes maravillosas. Saldremos adelante luchando todos con patriotismo.
ANDRÉS HURTADO GARCÍA
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO

Más de Redacción