Tropas turcas con apoyo aéreo de la coalición internacional lanzaron este miércoles una ofensiva para expulsar a los combatientes de Estado Islámico (EI) de la ciudad siria de Jarablus, fronteriza con Turquía, anunció en Ankara la oficina del primer ministro.
“Las fuerzas armadas turcas y las fuerzas aéreas de la coalición internacional lanzaron una operación militar que apunta a limpiar el distrito de Jarablus, en la provincia de Alepo, de la organización terrorista Dáesh”(acrónimo en árabe de Estado Islámico), dijo un comunicado del Gobierno turco. (Lea también: Kurdos-árabes buscan acabar foco del Estado Islámico en Alepo, Siria)
El canal NTV anunció que un pequeño destacamento de fuerzas especiales turcas había penetrado en territorio sirio, a unos kilómetros de la frontera, para despejar el terreno en vistas a una incursión militar que sería inminente.
Aviones F-16 turcos bombardearon sitios yihadistas en Jarablus, por primera vez desde noviembre del 2015, cuando cazas turcos derribaron un avión de combate ruso, agregó NTV. Jarablus es el último pasaje controlado por el Estado Islámico en la frontera turco-siria.
El anuncio del operativo turco coincide con la visita de este miércoles del vicepresidente estadounidense Joe Biden, quien se entrevistó en Ankara con el primer ministro turco, Binali Yildirim, y luego con el presidente Racep Tayyip Erdogan.
La situación en Siria y la extradición del predicador Fethullah Gülen, exiliado en Estados Unidos y acusado por Turquía de haber planeado el fallido golpe de Estado, fueron los principales temas de la visita.
“No tenemos ningún interés en proteger a una persona que habría perjudicado a un aliado, pero debemos respetar las exigencias en materia de las normas jurídicas” en Estados Unidos, agregó. Este proceso “tomará tiempo (...) La furia del pueblo turco es totalmente comprensible”, añadió el vicepresidente. No obstante, Biden aseguró que aún no se han presentado pruebas de golpismo contra Gülen
AFP