El ministro de Recursos Hídricos de Irak, Hasan al Yanabi, afirmó este lunes que la situación en la presa de Darbandiján (noreste), dañada por el terremoto de la noche del domingo ocurrido en la frontera con Irán, es “preocupante”.
La represa, ubicada en el río Diyala, tiene “daños visibles”, pero todavía se desconoce el alcance de los mismos, dijo el Ministro en un comunicado.
Pocas horas después del terremoto, el director de la presa de Darbandiján, Rahman Jani, advirtió que se habían detectado grietas en la superficie de la infraestructura y pidió a la población que evacuara la zona. Un equipo de ingenieros y geólogos del Ministerio se dirigió a la presa para dar apoyo al personal que trabaja en esa central hidroeléctrica y evaluar los daños.
El Ministro afirmó que la prioridad es ofrecer “seguridad” a los ciudadanos, por lo que las autoridades pretenden vaciar el depósito de agua de forma gradual. La presa contiene 1.500 millones de metros cúbicos de agua y está al 55 por ciento de su capacidad, según se explica en el comunicado.
Asimismo, el Ministro aconsejó a la población que vive río abajo “tomar precauciones” y “alejarse” del cauce del Diyala.
En el comunicado también se informó que se han realizado exámenes en otra represa, llamada Dukan y ubicada a unos 60 kilómetros en el noroeste de Suleimaniya, y se ha verificado que su situación es “tranquilizadora”.