La periodista Kim Wall, de 30 años, fue vista por última vez el 10 de agosto en un submarino junto al propietario de este, Peter Madsen. Wall se encontraba allí porque pretendía realizar un reportaje sobre como Madsen había construido el gigante submarino; sin embargo, después de que la nave zarpó del puerto Copenhague, en Dinamarca, se hundió.
La policía logró rescatar enseguida a Madsen pero no a Wall. La nave se sumergió y fue localizada en la bahía de Koge, cerca de la isla de Dragoer; el dueño de la embarcación se encontraba afuera, sobre la torre del aparato; sin embargo, ni en la nave, ni en el mar las autoridades lograron encontrar el cuerpo de la periodista a pesar de que la buscaron con helicópteros y barcos.
Días más tarde el cuerpo mutilado de una mujer fue hallado en una playa al sur de Copenhague, al parecer era el de la periodista sueca Kim Wall, de acuerdo con la policía danesa, que estaba a la espera del resultado de las pruebas de ADN.
El jefe de la investigación, Jens Moller Jensen, posteriormente informó en rueda de prensa que las muestras de ADN del torso encontrado coincidían con las recogidas en un cepillo de Wall y con la sangre encontrada en la nave.
"Parece que hay heridas en el torso que obedecen a un intento de sacar el aire y los gases para que el cuerpo no saliera a la superficie", reveló Jensen, además añadió que el cuerpo de la víctima tenía un metal fijado con el mismo propósito. Además, la ausencia de cabeza y las extremidades, que fueron cortadas de forma deliberada, hizo de la autopsia un proceso muy largo y complicado.

La policía logró rescatar enseguida a Madsen pero no a Wall. Ni en la nave, ni en el mar las autoridades lograron encontrar el cuerpo de la periodista.
Reuters
Mientras las investigaciones avanzaban, Peter Madsen permanecía en prisión preventiva por tentativa de homicidio involuntario con circunstancias atenuantes, al no tener pruebas técnicas que lo hicieran responsable del asesinato. La desaparición de Wall, de 30 años, fue denunciada por su novio la madrugada del viernes 11 de agosto, horas después de que esta se subiera al submarino de casi 18 metros de largo y 40 toneladas.
Las versiones del Madsen cambiaron durante la investigación. En un primer momento, el hombre dijo que la periodista había desembarcado con vida en la isla de Refshaleoen, en Copenhague, la noche del 10 de agosto. Después explicó que la mujer había muerto debido a un accidente y que, movido por el pánico, lanzó su cuerpo al mar. Según esta versión, él subió al puente del submarino, manteniendo la puerta de la escotilla de acceso a la torre donde se encontraba Wall. Resbaló y la escotilla de 70 kilos cayó sobre la cabeza de la periodista.
A pesar de que la investigación apuntaba a Madsen como el autor del asesinato, la falta de pruebas que lo incriminaran y su negativa al asumir la responsabilidad retrasaba el cierre del proceso. Por su parte, la pesquisa le permitió a la fiscalía danesa encontrar en el taller de Madsen un disco duro con películas "fetichistas" en las que mujeres "reales" eran torturadas, decapitadas y quemadas.

Peter Madsen, ingeniero autodidacta, obsesionado por la conquista del mar y del espacio, afirma ser inocente, a pesar de los numerosos indicios en su contra.
Scanpix Denmark / AFP
El 6 de octubre la policía anunció haber hallado la cabeza y las piernas de la periodista sueca Kim Wall en la bahía de Koge, a unos 50 km al sur de Copenhague. Según los investigadores, primero se descubrió una bolsa con ropa de la periodista. "En la misma bolsa, había un cuchillo y tuberías de plomo para hundirla", señaló Moller. Además, las dos piernas fueron encontradas después. La "cabeza que se encontraba también en una bolsa, que fue igualmente lastrada con múltiples piezas de metal", concluyó Moller.
La acusación sostiene que el hombre mató a Wall para satisfacer sus fantasías sexuales, y que después mutiló el cuerpo.
El caso no se ha cerrado todavía y la investigación tomó un nuevo giro cuando Madsen, sindicado de ser el responsable del asesinato de Wall, admitió haber mutilado el cadáver de la mujer y luego haber lanzado las partes al mar, aunque niega haberla matado.
Por el momento Madsen es acusado de homicidio y trato indecente con cadáver y la policía danesa está a la espera del juicio en su contra que se hará a principios del próximo año.
ELTIEMPO.COM
*Con información de EFE y AFP
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