Francia comenzó este martes el confinamiento de su población con "las medidas más estrictas" de Europa para evitar la propagación del coronavirus en el país.

Las cenas entre amigos o familia, los partidos de fútbol, los encuentros para jugar a las cartas... ya no solo están desaconsejados, ahora están prohibidos según las medidas del gobierno francés.

Más de 100.000 policías están en las calles para hacer cumplir las medidas de confinamiento en el país. Esos agentes podrán imponer multas de hasta 135 euros (151 dólares) a quienes no respeten la consigna de quedarse en casa a no ser que sea por motivos laborales, sanitarios, alimenticios y, en casos excepcionales, familiares.

Monumentos emblemáticos como la Torre Eiffel, la basílica del Sagrado Corazón de Montmartre o la plaza de la catedral en Estrasburgo lucen vacías ante las medidas de confinamiento. El Museo de Louvre y la Torre Eiffel cerraron el viernes de manera indefinida.

Antes del inicio de las nuevas medidas, se podían observar largas filas en los supermercados y farmacias de ciudadanos que hacían compras necesarias para pasar el confinamiento.

La limitación anunciada el lunes por el presidente Emmanuel Macron regirá inicialmente por 15 días pero podría extenderse. Para salir, todos los ciudadanos deberán justificar los desplazamientos con un certificado que podrán descargar en Internet o deberán hacerlo a mano si no disponen de impresora.

Certificado que deben presentar los ciudadanos que salgan de su casa en Francia.

En Francia, ha habido 1.210 nuevos casos y 21 muertos en 24 horas, lo que eleva el balance a 6.633 contagios y 148 fallecimientos.

La imagen muestra la estación de tren Gare du Nord vacía ante las restricciones de movilidad en el país.

La plaza de la catedral en Estrasburgo, Francia, custodiada por la polícia para evitar que se violen las medidas de confinamiento.