El presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó este miércoles que "el negocio de las drogas ha crecido un 50 por ciento" en Colombia desde que Iván Duque es presidente, y acusó al país -junto a Honduras, Guatemala y El Salvador- de enviar a propósito criminales a EE. UU.
"No tengo dudas de que Honduras, Guatemala, El Salvador y Colombia (...) los están mandando a Estados Unidos porque no los quieren, porque creen que la gente de Estados Unidos es estúpida y los recibe", dijo Trump en un acto de recaudación de fondos para su campaña electoral en San Antonio (Texas).
"Están mandando a verdaderos asesinos porque no quieren a las pandillas, así que las envían a nuestro país", subrayó Trump en referencia a los países mencionados.
Sobre Colombia, Trump dijo que "infortunadamente, el negocio de las drogas ha crecido un 50 por ciento desde que (Duque) está ahí", añadió el mandatario estadounidense, sin citar la fuente de ese dato.
El presidente estadounidense lanzó a finales de marzo la misma crítica a su homólogo colombiano sobre este tema.
El canciller Carlos Holmes Trujillo respondió a las críticas de Trump de esta manera: "El Presidente Trump conoce los inmensos esfuerzos que ha hecho el Presidente Duque desde el inicio de su Gobierno y sabe que la única manera de combatir eficazmente el problema mundial de las drogas es actuando conjuntamente contra la producción".
Ante las primeras críticas de Trump, Trujillo había hecho una declaración de contenido similar.
(Los que vienen de) Colombia, Guatemala, Honduras, son gente mucho más dura, son más peligrosos. Esos países están enviando a los más duros, están enviando a los pandilleros.
A lo que si no aludió Trujillo fue a lo más novedoso de las críticas de Trump. El mandatario, por primera vez, englobó a Colombia en lo que él considera una campaña deliberada de los países del Triángulo Norte de Centroamérica para enviar a pandilleros y criminales a Estados Unidos de forma irregular.
"(Los que vienen de) Colombia, Guatemala, Honduras, son gente mucho más dura, son más peligrosos. Esos países están enviando a los más duros, están enviando a los pandilleros", aseguró Trump.
En cambio, "la gente de México entra, ayuda con la agricultura y sale, sin problemas", agregó. Esa declaración de Trump contrasta con el discurso inicial de su campaña electoral, en 2015, cuando arremetió específicamente contra los inmigrantes mexicanos y los llamó "violadores" y "criminales".
El presidente estadounidense ha suavizado su discurso hacia México en la última semana, al considerar que el país vecino estaba haciendo un "buen trabajo" a la hora de deportar a indocumentados centroamericanos en su frontera con Guatemala.
Trump y el Congreso estadounidense han expresado reiteradamente su preocupación por el auge en los cultivos de coca, que en 2017 crecieron un 17 % y alcanzaron un récord de 171.000 hectáreas, 25.000 más que en 2016, según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
En 2017, Trump amenazó con poner a Colombia en una lista negra que podría llevar a la reducción de ayuda económica, pero luego firmó un acuerdo con el gobierno colombiano para que rebaje la producción estimada de cocaína y los cultivos de coca en un 50 por ciento para 2023.
Al recibir a Duque en la Casa Blanca, el pasado mes de febrero, Trump insinuó que Colombia va atrasada en la erradicación de cultivos de coca, pero confió en que puedan ponerse al día "en un futuro cercano".
EFE-PÓLÍTICA