Representantes de la comunidad wayú se desplazaron esta semana a Washington para denunciar ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) lo que ven como el incumplimiento del Gobierno de Colombia a las medias cautelares que este órgano concedió, desde diciembre del 2015, para proteger a niños de esta comunidad afectada por temas de malnutrición, falta de agua y acceso a un buen servicio de la salud.
Este viernes, en la reunión con los representantes de la Comisión, los líderes indígenas reportaron la muerte de otros 104 niños durante el 2016 y de nueve en lo que va del 2017. Así mismo, el deceso de 36 madres lactantes el año pasado, al igual que varias amenazas por denunciar los casos.
En febrero del 2016, la CIDH adicionó las madres lactantes a las medidas cautelares que había concedido a niños y adolescentes. En la reunión, el Gobierno colombiano estuvo representado por el embajador ante la OEA, Andrés González, con quien se pactó una cita el próximo 25 de marzo en La Guajira con el fin de buscar soluciones a la crisis.
Los líderes indígenas también llevaron su denuncia ante el Congreso de EE.UU., donde fueron recibidos por asesores del senador Patrick Leahy y otros legisladores.
Así mismo, visitaron el departamento de Estado y varias ONG, entre ellas Human Rights Watch y Wola. En esta última asistieron a la presentación de un nuevo documental del periodista Gonzalo Guillén sobre el represamiento del río Ranchería y las consecuencias que eso ha tenido para sus comunidades.
Los indígenas llegaron a Washington acompañados por los senadores Sofía Gaviria y Alexánder López.
Según López, algunos congresistas de Estados Unidos viajarán en los próximos meses a Colombia para conocer la situación del pueblo wayú de primera mano.