Ivanka Trump, hija y asesora del presidente estadounidense, Donald Trump, reconoció este jueves haber declarado en una investigación judicial por el posible uso indebido de fondos de la ceremonia de investidura de su padre en 2017.
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La Fiscalía del Distrito de Columbia (D.C.), donde se encuentra Washington, señala en su acusación que el Comité Presidencial de Investidura utilizó de manera indebida más de un millón de dólares, y que esos fondos "fluyeron directamente a la familia Trump" por el uso de espacios en el hotel Trump en la capital.
"Esta semana dediqué más de cinco horas a declarar con la oficina del fiscal general demócrata de D.C. en las que me preguntaron sobre las tarifas cobradas por el Hotel Trump en la investidura", señaló Ivanka Trump en un mensaje en Twitter.
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Les compartí un correo electrónico de hace cuatro años en el que enviaba instrucciones para que fueran a un precio justo de mercado, lo que el hotel hizo
Ivanka Trump y su esposo, Jared Kushner.
Mandel Ngan /AFP
"Les compartí un correo electrónico de hace cuatro años en el que enviaba instrucciones para que fueran a un precio justo de mercado, lo que el hotel hizo", agregó. Ivanka culminó su mensaje criticando la investigación como una nueva muestra de resentimiento y gasto de dólares del contribuyente políticamente motivada".
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De acuerdo al documento judicial, Rick Gates, presidente adjunto del comité de investidura, escribió en diciembre de 2016 a la hija del mandatario para señalar que "estaba un poco preocupado por la imagen que daba el hecho de pagar una tarifa alta por el Hotel Trump y que los medios pudieran hacer una gran historia de ello".
Esta investigación se produce después de continuas críticas a la mezcla de intereses privados y gasto público por parte de Trump, quien ha pasado gran parte de su tiempo de descanso en algunas de sus residencias privadas, especialmente en Mar-a-Lago (Florida), donde ha llegado a recibir a líderes extranjeros.
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EFE
