Los incendios forestales en California, Estados Unidos, quemaron un récord de más de 800.000 hectáreas en lo que va del año, según el Departamento de Bomberos de ese estado, y ocasionaron que el cielo se tiñera de naranja en la ciudad de San Francisco. Conozca las impresionantes fotografías de este efecto en el cielo.

Las enormes columnas de humo por los incendios forestales que azotan el occidente de Estados Unidos tornaron los cielos de un color anaranjado que asombró a muchos este miércoles 9 de septiembre.

El 'Creek fire' (incendio de Creek), decretado el viernes en el norte de California, calcinó casi 55.000 hectáreas, destruyó 65 inmuebles y está fuera de control, dijo el Departamento de Silvicultura y Protección contra Incendios de California (Cal Fire).

Aunque el fenómeno se ha registrado en San Francisco, la ciudad de Fresno ha sido una de las más afectadas. Allí, varias comunidades recibieron la orden de evacuar sus casas. Docenas de personas quedaron atrapadas entre las llamas por la rápida expansión del fuego y el jefe del Batallón de Bomberos de Fresno, Tony Escobedo, dijo que el humo ha obstaculizado el trabajo de los helicópteros militares para las misiones de rescate.

"La dificultad de los helicópteros para atravesar el humo ha sido un problema", dijo Escobedo. "No pudieron aterrizar, aunque lo intentan varias veces", agregó.

El Departamento de Bomberos de Fresno tuiteó que tras los repetidos intentos por aterrizar "pronto se hará otro esfuerzo para evacuar a las personas atrapadas en el lago Edison y China Peak usando visión nocturna". Además, se dio a conocer que tienen información de más de 50 personas atrapadas".

Las personas atrapadas se encuentran a salvo en refugios temporales, según dijo el teniente Brandon Purcell, de la Oficina del Sheriff de Fresno, para quien el incendio es "un desastre sin precedentes". Durante el fin de semana, helicópteros militares rescataron a más de 200 personas atrapadas por el fuego cerca del embalse de Mammoth Pool.

La región ha sufrido muchos incendios grandes en los últimos años, pero el supervisor forestal del Bosque Nacional Sierra, Dean Gould, dijo en una sesión informativa del pasado lunes que 'Creek fire' era, probablemente, el más agresivo y "único en su clase".

El departamento de bomberos informó que 976 miembros del personal estaban luchando contra el incendio, que sigue creciendo "en condiciones extremas".

"En los últimos 33 años no hemos visto un solo año sobrepasar los dos millones de acres (más de 809.300 hectáreas), hasta este año", dijo Lynne Tolmachoff, portavoz del Cal Fire. "Esto definitivamente es un récord y aún no nos hemos acercado al final de la temporada de incendios", subrayó.

Este hecho sin precedentes llegó en momentos en que la temporada de incendios forestales todavía tiene, aproximadamente, dos meses por delante para su final en el estado más poblado de Estados Unidos, donde miles de bomberos están luchando contra las llamas en medio de una ola de calor abrasador.

Al menos siete personas murieron como resultado de los incendios de este año y unas 3.800 estructuras fueron dañadas o destruidas, según cifras de Cal Fire.

La última vez que la cantidad de tierra quemada se acercó a las 800.000 hectáreas fue en 2018, el mismo año del devastador incendio 'Camp fire', cuando ardieron unas 769.000 hectáreas.

Más de 14.100 bomberos estaban luchando contra 24 incendios forestales diferentes hasta este lunes por la tarde en California, dijo el departamento de bomberos en una publicación en la red Twitter.

California ha soportado condiciones abrasadoras últimamente, con temperaturas que alcanzaron un récord de 49 grados celsius este domingo en Woodland Hills, un récord histórico para el condado de Los Ángeles, según el Servicio Meteorológico Nacional.

Según AP, en este estado hay muchos incendios forestales por la presencia de feroces vientos en el otoño, abundancia de maleza, frecuentes sequías, gente que se adentra en zonas silvestres, viviendas que se queman fácilmente, incendios provocados por seres humanos y, sobre todo, el cambio climático.