Mientras Irma se cierne sobre el sur de Florida, otros dos huracanes amenazan la cuenca atlántica: Katia, que en las últimas horas se ha fortalecido hasta alcanzar la categoría 2, y José, que se mantiene con categoría 4 en la escala Saffir-Simpson.
El huracán José, que ha ido tomando fuerza y ya mueve vientos máximos sostenidos de 240 kilómetros por hora y se mueve rumbo al este-sureste rumbo a las Antillas Menores, que intentan todavía recuperarse del embate hace escasos días de Irma.
"Apenas tuvimos tiempo de asimilar Irma y llega José", es el sentimiento en la isla francesa de San Bartolomeo, donde las comunicaciones son muy limitadas y el rescate recién comenzaba a organizarse cuando se avecina otro huracán que incrementa el nerviosismo.
Las tensiones emergen en un momento en que algunos esperaban desde hace muchas horas en aeropuertos, carreteras y terminales, con la esperanza de poder salir de la isla ante la llegada de José que está a menos de 100 kilómetros de las costas.
Varios aviones aseguraron la evacuación de las personas que pidieron refugiarse en Guadalupe, el departamento francés vecino, dando prioridad a las mujeres y a los niños.
En un momento en que la cantidad de personas cuyas viviendas están inhabitables todavía no ha sido censada, todo se vuelve complicado y las autoridades tienen la intención de esperar el paso de José para poder asegurar la distribución de agua y de comida.
Afortunadamente para las islas caribeñas, que están bajo su previsible trayectoria, "son posibles algunas fluctuaciones en la intensidad durante el próximo día o más, por lo que luego se espera debilitamiento gradual".
Los vientos con fuerza de huracán de José, que sigue la estela de Irma, se extienden a unos 55 km del centro y los vientos con fuerza de tormenta tropical se extienden a unos 185 km.
Hace dos días Irma pasó con gran virulencia sobre las Antillas y ahora se encuentra entre Cuba y Bahamas, amenazando con tocar tierra en la noche del sábado al domingo cerca de Miami (Florida), donde precisamente se encuentra la sede del CNH, con una categoría 4.
El principal temor es que los escombros que dejó Irma provoquen más daños.
Las fuertes rachas arrancaron techos, aplastaron contenedores de embarcaciones y dejaron escombros por todas partes, lo que los convierte en el principal peligro.
La Cruz Roja Internacional informó que Irma afectó a 1,2 millones de personas hasta el presente, pero que la cifra podría elevarse a 26 millones. El Caribe también se enfrenta a la furia de un tercer huracán, Katia, que amenaza el estado mexicano de Veracruz, donde sus habitantes aceleraban preparativos de seguridad.
AFP, Efe y Reuters