El secretario de Seguridad Nacional de EE. UU., John Kelly, desveló el miércoles mayores medidas de seguridad para los vuelos procedentes del extranjero, evitando extender la prohibición de llevar dispositivos móviles y otros electrónicos grandes en cabina.
“La inacción no es una opción”, comentó Kelly, quien agregó que cree que las aerolíneas cumplirán con los nuevos requisitos.
Asimismo, indicó que las medidas no serán las últimas para mejorar la seguridad. Los funcionarios estadounidenses exigen un control reforzado a pasajeros, dispositivos electrónicos personales y de detección de explosivos a los cerca 2.000 vuelos comerciales que llegan a diario al país desde 280 aeropuertos en 105 países.
La decisión de no imponer nuevas restricciones a los portátiles es un triunfo para las aerolíneas, que estaban preocupadas porque una posible ampliación de la prohibición a Europa y otros lugares pudiera generar grandes problemas logísticos y disuadir a algunas personas de viajar.
Las aerolíneas que no cumplan los nuevos requisitos de seguridad podrían enfrentarse a más restricciones a electrónicos dentro de la cabina, señaló Kelly.
Funcionarios europeos y estadounidenses dijeron que las compañías tienen 21 días para instalar detectores mejorados de explosivos y 120 días para cumplir otras medidas de supervisión de pasajeros.
Funcionarios de aerolíneas dijeron que tendrán que asumir la mayor parte de los costos de las nuevas medidas.
Fuentes indicaron que les preocupa implantar los nuevos requisitos de seguridad mejorada en los cerca de 280 aeropuertos con vuelos directos a Estados Unidos en lugar de enfocarse en los lugares donde es mayor la amenaza.
EE. UU. había impuesto en marzo controles a los portátiles en vuelos procedentes de 10 aeropuertos en 8 países, incluidos Egipto, Arabia Saudita, Kuwait, Catar y Turquía.