La derrota de la Selección Colombia en su debut mundialista frente a Japón este martes (1-2) dejó abajo los ánimos de los hinchas colombianos en el país y en el El Mordovia Arena, el estadio en Rusia donde combinado nacional se estrenó en la competencia y donde hacia fuerzas por el equipo la seguidora número 1 de James Rodríguez, su hija Salomé.
En medio del partido, una escena llamó la atención de los seguidores de la Selección Colombia en la tribuna: la pequeña hija de James Rodríguez (y sobrina del portero David Ospina) llorando en los brazos de su mamá, Daniela Ospina, y siendo consolada por la pareja de famosos colombianos Sebastian Martínez y Kathy Saenz.
No fue un día fácil para la Selección, ni para James. El 10, estrella del Bayern de Múnich, no pudo ser inicialista y el equipo nacional quedó con sus posibilidades reducidas de cara a la clasificación a octavos de final, aunque todavía se puede.
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