La Policía de São Paulo llevó a cabo una de las mayores operaciones contra el tráfico de drogas en la zona conocida como ‘Cracolandia’ en el centro de la ciudad.

Los agentes llegaron al lugar a las 6:49 a. m. del pasado domingo y armados con bombas desmantelaron la ‘feria al aire libre’ que operaba allí y que vendía crack principalmente.

Los policías informaron después de la operación que será necesario que se instalen agentes de la Guardia Municipal en la región para evitar que los vendedores y consumidores de drogas vuelvan al lugar.

Parte de la operación fue acompañada por el gobernador Geraldo Alckmin, quien aseguró que la acción logrará que los traficantes vayan a la cárcel.

En cuanto a los consumidores, Alckmin indicó que el Estado ofrece tratamiento para que estos logren abandonar la adicción y puntualizó en que “la dependencia química es como la apendicitis, es necesario tratar a la persona”.

En la operación fueron detenidas 38 personas, incluidos ocho de los principales traficantes del área y un grupo que es sospechoso de haber asumido la seguridad de ‘Cracolandia’.

Cerca de 900 uniformados, de la Policía civil y la Policía militar, intervinieron el lugar. El área fue cercada por la patrulla de choque.

La acción fue planeada desde febrero y comenzó con la identificación de los principales cabecillas y traficantes que operaban en el lugar. Luego se prepararon los equipos tácticos para el asalto a la calle.

Presintiendo la intervención, en la semana previa al asalto criminales atacaron en dos oportunidades a los policías militares e intentaron desviar la investigación para evitar que integrantes de las organizaciones fueran capturados.

La intervención había sido discutida por policías y miembros de la Alcaldía; esta última tiene planes de reconstruir la zona. Hasta finales de abril había un operativo que intentaba evitar que la ‘feria libre’ se tomara más cuadras.

La operación anterior en ‘Cracolandia’ había tenido lugar en agosto de 2016 cuando 32 personas fueron capturadas bajo sospecha de ser parte de una red que distribuía los estupefacientes en esa zona de la capital paulista.

El grupo de sospechosos era liderado por representantes del movimiento ‘sin techo’ que, según la Policía, tenían un puesto de avanzada de las drogas en un hotel del centro de la ciudad conocido como ‘Cine Marruecos’.

‘Cracolandia’ ya había sido objeto de intervenciones organizadas por los dirigentes Geraldo Alckmin y Fernando Haddad; sin embargo, no evitaron que aumentara la concentración de usuarios de crack y el asentamiento de traficantes.