En lo corrido de este año las autoridades – Fuerza Pública, jueces y fiscales - han incautado más de 35.000 armas de fuego, las cuales fueron fundidas esta mañana en los hornos de la Siderúrgica Nacional (Sidenal), ubicada en Sogamoso, Boyacá.
De esta forma se da cumplimiento al decreto que establece que “es deber del Estado destruir el material decomisado que se encuentre inservible, obsoleto o en desuso y no pueda ser reconvertido o utilizado por la Fuerza Pública”.
Se incluyen además las armas utilizadas en la comisión de delitos que han estado involucradas en procesos penales o por el uso indebido que hacen los ciudadanos de las mismas o simplemente porque ya no las quieren tener.
Las armas fueron fundidas entre el 24 y 30 de noviembre y supervisando la acción estuvo el Inspector General de las Fuerzas Militares, mayor general Juan Pablo Amaya Kerguelen.
De acuerdo con información del Departamento Control Comercio de Armas, Municiones y Explosivos desde 2010 hasta el 2017 se han fundido 297.184 armas de fuego que no circularán más por el país, sino que este metal es convertido en material para la construcción, contribuyendo así las Fuerzas Militares y demás entes del Estado al desarrollo del país.
JUSTICIA
Desde el 2010 a la fecha se han fundido 297.184 armas de fuego
