En una estrategia que buscaba facilitar el paso de un camión cargado con ácido sulfúrico desde Barranquilla a Norte de Santander, los narcotraficantes ordenaron al conductor del automotor que emprendiera su viaje ayer, momentos previos al partido de fútbol entre las selecciones de Colombia y Bolivia, considerando que los uniformados estarían distraídos.
Un grupo especial de la Policía Antinarcóticos le venía siguiendo el rastro al cargamento, tomando como base que el ácido sulfúrico es uno de los tres químicos fundamentales para el procesamiento del clorhidrato de cocaína.
Los agentes Antinarcóticos conocían que este era un encargo de la red criminal de ‘los Pelusos’ – disidencia del Epl – que controla los laboratorios y la producción de cocaína en la región del Catatumbo (Norte de Santander).
Los 3.100 kilos del ácido estaban camuflados en un tanque cisterna que fue abierto con todas las medidas de seguridad. Con esta incautación se dejaron de producir 60 toneladas del alcaloide. El químico está avaluado en más de 400 millones de pesos. JUSTICIA
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