La Fiscalía solicitó este miércoles que se condene al ciudadano cubano Raúl Gutiérrez Sánchez, capturado en marzo del 2018 por su presunta participación en la planeación de atentados en Bogotá, por el delito de concierto para delinquir agravado, mientras que para el delito de tentativa de terrorismo pidió la absolución porque no cuenta con el material probatorio suficiente.
Los presuntos planes de atentado por los que se investigó a Gutiérrez eran especialmente contra ciudadanos norteamericanos, por lo que en su momento se le imputaron los delitos de terrorismo y concierto para delinquir, cargos que el cubano no aceptó.
El próximo 20 de mayo el juez dará a conocer el sentido del fallo contra Gutiérrez y se sabrá si será condenado o absuelto.
El delegado de la Fiscalía dijo en los alegatos finales que a través de chats de WhatsApp y Telegram se evidenció que el cubano quería ser un musulmán de lucha, no uno de escritorio, además, se dijo que fue él quien contactó a sus interlocutores.
"No es buscado por nadie, ni contactado con nadie, él es quien busca a un interlocutor que lo aliente", señaló el fiscal.
También dijo que Gutiérrez es un posible terrorista solitario, porque no tenía arraigo ni en Colombia ni en Estados Unidos, aunque dijo que su familia estaba allá, pero en los chats que se analizaron no se encontraron conversaciones afectivas con familiares.
El fiscal agregó: "no puede regresar a Estados Unidos, no es bienvenido en Cuba y ha sido expulsado 2 veces de Colombia (...) Estaba solo, y como el mismo dijo, enojado con el mundo".
A través de la investigación la Fiscalía determinó que "era un potencial terrorista y se concertó para realizar atentados terroristas", también se dijo que tenía habilidad para falsificar documentos, por lo que le sería fácil salir del país una vez cometidos los hechos.
De hecho, en las conversaciones se encontró que tenía planeado huir de Colombia por Brasil e ir a Argentina, para cometer otros atentados allí.
"Señoría, se puede concluir que había voluntad de hacer acuerdos para llevar a cabo atentados terroristas", le dijo el encargado de la Fiscalía al juez.
La defensa, por su parte, dijo que "no hay pruebas que indiquen que Raúl Gutiérrez profesara la religión islámica ni que la lleve al extremo para cometer acciones terroristas contra personas o bienes"
Además, el abogado Alejandro Toro afirmó que "no sé probó que los interlocutores fueran terroristas".
Por otra parte, resaltó que "brilla por su ausencia la delimitación de los hechos jurídicamente relevantes", refiriéndose a que no hay circunstancias de tiempo, modo y lugar que den cuenta de los supuestos atentados a la embajadas de Estados Unidos y Cuba y ni en contra de Gustavo Petro o Rodrigo Londoño, alias Timochenko.
Por ello, le pidió al juez que considere que nunca estuvieron en peligro la vida de estas personas porque no hubo voluntad de realizar acciones terroristas. "Los atentados son irreales y fantasiosos entre terroristas ficticios" y concluyó pidiendo un sentido de fallo de carácter absolutorios por los dos delitos.
La Fiscalía ha hecho conmigo un show mediático, un falso positivo, pero no tiene una sola prueba contra mí, no tiene evidencia física ni testigos que prueben o confirmen de lo que se me acusa
Durante la diligencia, Gutiérrez pidió la palabra y dijo que llegó a dos conclusiones, la primera : "soy un tonto, sin falta de oficio, una persona trastornada por su situación personal con carencias y pérdidas emocionales, afectado por el destierro, por el abandono de mi mujer, la pérdida de mi familia, por una sociedad moderna que se ocupa de esclavizarlo a uno mas no se ocupa del ser humano como tal, trastornada por el veneno de internet, en realidad soy una persona patética".
La segunda conclusión fue: "la Fiscalía ha hecho conmigo un show mediático, un falso positivo, pero no tiene una sola prueba contra mí, no tiene evidencia física ni testigos que prueben o confirmen de lo que se me acusa".Finalmente, recalcó que se considera inocente y pidió perdón a la sociedad colombiana y a todos los involucrados en la investigación que desencadenaron sus "actos infantiles".
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