A la fiscal Carmen Sofía Castilla Villero, adscrita a la Unidad de Delitos contra la Fe Pública y Patrimonio Económico, le imputó la fiscal 99 el delito de concusión con circunstancia de mayor punidad por presuntamente pedirle dinero al empresario Mayid Alfonso Castillo Arias, Presidente de Castillo y Asociados y Fundador de la IPS Médicos y Asociados.
Según la investigación que adelanta el ente acusador, Castillo Arias realizó una denuncia ante la Fiscalía General de la Nación el 30 de agosto del presente año, en la que afirmó que la fiscal Castilla Villero le pidió la suma de 300 millones de pesos para archivar el proceso que la suscrita llevaba adelantando
El empresario afirmó en su testimonio que había sido víctima de presiones indebidas cuando fue llamado al despacho de la fiscal para un interrogatorio. Al final de este, presuntamente la fiscal le dijo que ella le podía colaborar con el archivo del proceso por la suma de 300 millones de pesos.
Ya que se adelantaba una investigación de falsedad en documento privado contra Castillo Arias, al parecer este, de 78 años de edad, accedió a una segunda cita el 1 de marzo de 2017 en una cafetería del Centro Comercial Niza, en la que, según la fiscalía, Castilla Villero comienza a infundirle temor dándole a entender que las consecuencias de un fallo en su contra serían bastante graves debido a que es un conocido profesional de la medicina y presiente de una compañía muy importante.
Aunque el empresario se negó en un comienzo porque le parecía una suma bastante grande y porque además le informó a la fiscal que el ya había dado sus descargos y que había intentado comprobar su inocencia, presuntamente accedió a una segunda reunión el 26 de septiembre, cerca a la Avenida Suba en la panadería Panísimo, en la que le reitera que la única que puede resolver los problemas es ella.
Es así como ese día negocian nuevamente el valor y llegan al acuerdo de 50 millones de pesos, que se iban a dar en dos pagos: uno a mediados de octubre (que presuntamente se dio durante esta semana) y otro a finales de ese mismo mes.
Adicionalmente, según la fiscalía, hubo una cuarta reunión el 4 de octubre en que la fiscal le dice a Castillo Arias que resulta “jarto y bochornoso” que le lleguen nuevas denuncias a su despacho sobre su proceso -en total 3 más-, explicándole que tiene que “cuadrar con ella y no incurrir a abogados” para poder archivarlo definitivamente.
Al final de la audiencia de imputación, la Fiscalía afirmó que dentro de sus elementos materiales probatorios tenía pantallazos y audios que grabó el mismo Castillo Arias en los que involucra directamente a Castilla Villero.
La fiscal, que fue capturada el día de ayer a las 5 de la tarde en el mismo lugar en el que tuvo una de las reuniones con el empresario -en Panísimo- aceptó cargos y podrá tener el beneficio de la rebaja de hasta el 50 % de la pena, que va de 96 a 180 meses.
JUSTICIA
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