La Fiscalía completa dos semanas revisando la documentación que incautó en las instalaciones del Acueducto de Bogotá dentro de la investigación por el pago de un supuesto soborno para que la brasileña Odebrecht se quedara con el interceptor Tunjuelo-Canoas, tasado en 243.000 millones de pesos.
Algunos de los nombres que han encontrado en ese expediente ya habían sido mencionados en la investigación por el ‘carrusel de la contratación'.
Uno de ellos es el de la asesora de la gerencia Sandra Guzmán, una abogada cordobesa, quien era invitada especial a los comités de la entidad, en donde se discutía desde el cupo de endeudamiento hasta el cronograma de obras. El nombre de la influyente asesora apareció por primera vez en la contabilidad personal de Emilio Tapia, uno de los cerebros del robo a Bogotá.
Cuando EL TIEMPO reveló esa contabilidad, Tapia –que ahora colabora en el rastreo de los sobornos de Odebrecht– aseguró que Guzmán era una amiga cercana a la que le hacía algunos favores. Lo que acaban de establecer las autoridades es que la asesora de la gerencia también es muy cercana al senador Bernardo Miguel Elías, del municipio Sahagún, como Tapia.
Si bien Guzmán llegó al Acueducto cuando la obra indagada ya estaba en manos de Odebrecht, se ejecutó con ella en la entidad.
Su jefe era Luis Fernando Ulloa, quien reemplazó en el cargo a Jorge Enrique Pizano, hoy empleado de Odebrecht. Ulloa era gerente de Planeación y Control cuando la brasileña se quedó con el contrato. La amiga de Tapia y del senador Elías venía de servir de enlace entre el Congreso y la Fiscalía de Mario Iguarán.
El arbitramentoAdemás de indagar por la asesora y por otros cinco altos funcionarios del Acueducto –entre ellos Mirian Margot Martínez, también mencionada en el ‘carrusel’–, la Fiscalía revisa el tribunal de arbitramento que condenó al Acueducto a reconocerle a Odebrecht 12.000 millones de pesos.
(Además: Esta es la evidencia del engranaje corrupto de Odebrecht)
El arbitro que escogió el Acueducto, por recomendación de Alberto Merlano Alcocer, fue a Herman Arias, expersonero de Bogotá.
“La Fiscalía no me ha llamado, ni a ninguno de los árbitros. El laudo está apegado a la ley”, le explicó Arias a EL TIEMPO.
Y agregó que de una pretensión de unos 70.000 millones de Odebrecht, hubo un reconocimiento de apenas 2.000 millones: “Estamos atentos a acudir a dar cualquier explicación, es un laudo extenso y perfectamente claro”, dijo Arias.
Para el expersonero de Bogotá, el fallo no favoreció a Odebrecht ni a sus socios de CASS, sino al Acueducto.En todo caso, las autoridades revisarán ese y otros fallos de arbitramento, como el que se cocinaba en la Ruta del Sol II y el que pagó Isagén por Hidromiel.
EL TIEMPO llamó a los teléfonos que Sandra Guzmán tenía registrados, pero dijeron no conocerla. El senador Elías no responde.
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