A puerta cerrada y sin la presencia física de Rafael Uribe Noguera se llevará a cabo esta tarde la audiencia de acusación del confeso asesino de la niña Yuliana Samboní.
Para evitar alteraciones del orden público y garantizar la integridad de Uribe, la defensa solicitó que la diligencia se realice a través de una videoconferencia, y así desde la cárcel La Picota el sindicado escuche las imputaciones en su contra.
(También: El estricto protocolo de los guardianes que custodian a Rafael Uribe)
Fuentes cercanas a la defensa confirmaron a EL TIEMPO que Uribe aceptará los cargos que se le imputan por feminicidio agravado y acceso carnal violento agravado, en concurso con secuestro simple agravado.
“Esta sería su única intervención durante la audiencia: aceptar los cargos. Él no va a eludir, ni dilatar su responsabilidad. Es consciente de que acabó con su vida, la de su familia, la vida de la niña y la vida de la familia de la menor”, dijo la fuente.
No se descarta que durante la videoconferencia Uribe Noguera pida perdón a la familia Samboní por el homicidio que conmocionó al país el pasado 4 de diciembre.
La Fiscalía llevará ante el Juez 35 de conocimiento más de 100 pruebas recaudadas, entre testimonios, videos, línea de tiempo, necropsia y la propia confesión que Uribe hizo reconociendo el crimen.
La prueba reina del ente acusador es la genética forense que reveló Medicina Legal en la que se advierte: “el Instituto encuentra, sin ninguna duda y con certeza científica, que se encontró material biológico que vincula al señor Rafael Uribe en la muerte y abuso sexual de la menor de 7 años”, aseguró en su momento Carlos Eduardo Valdés, director de Medicina Legal.
Se espera que este miércoles se fije fecha para una nueva audiencia en la que se dará a conocer la condena, la cual podría estar en 60 años de prisión.
JUSTICIA