Debido a la violencia en el marco del conflicto armado, las últimas tres décadas han dejado más de 158.000 víctimas de desplazamiento masivo provocado por guerrilla, paramilitares, narcotraficantes y el Estado, en la región de Montes de María, en el caribe colombiano.
De acuerdo con una investigación que fue presentada como informe ante la Comisión de la Verdad, más de 82.600 hectáreas de tierra fueron abandonadas por los campesinos debido al miedo y la violencia.
(Lea también: Términos en procesos judiciales seguirán suspendidos hasta 8 de junio)
El informe, llamado 'Montes de María bajo fuego', fue realizado por la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento, la Fundación Cultura Democrática, la Corporación Opción Legal, la Universidad Tecnológica de Bolívar y las Organizaciones de Población Desplazada de Montes de María.
El documento detalla cómo la violencia en los Montes de María fue usada como un recurso para mantener y profundizar la concentración de la tierra, dando paso a la industrialización del campo, algo que afectó críticamente la vida campesina.
De acuerdo con la investigación, en la segunda mitad de la década de los 90, con la llegada del paramilitarismo a la región, aliado con sectores estatales, comenzaron las masacres y el desplazamiento forzado de campesinos, que en conjunto con los enfrentamientos de los 'paras' con las Farc, dejaron durante aproximadamente tres décadas más de 158.000 víctimas, y más de 82.600 hectáreas abandonadas.

El documento detalla cómo la violencia en los Montes de María fue usada para profundizar la concentración de la tierra y dar paso a la industrialización del campo.
Cortesía OPDS Montes de María
En cuanto a la incidencia de las Farc, el informes analiza que la guerrilla logró consolidarse en la zona entre 1987 y 2007, y violentaron particularmente a campesinos hacendados en las zonas planas contiguas a la serranía, con la excusa de que apoyaban al paramilitarismo.
El informe también señala que para mediados de los 90, las Farc habían crecido en la región, al punto que se les adjudican 13 tomas guerrilleras de corregimientos de la zona y años después, hacia el 2001, el derribamiento de 50 torres de energía. También se consigna que sostuvieron más de 40 combates con el ejército antes de ser finalmente derrotado militarmente años después, con la muerte de su comandante en la zona, Martín Caballero.
(Le puede interesar: Las escuelas de horror donde ‘fabricaban’ a los paramilitares)
Paramilitares y Fuerza PúblicaEl informe también incluye un apartado sobre cómo el conflicto se agudizó con la intervención de paramilitares y su actuar amparado en las cooperativas de seguridad privada Convivir, esto llevó a una persecución generalizada contra campesinos, dirigentes sociales y políticos alternativos, actos que se extendieron desde mediados de los 90 hasta el primer lustro del sigo XXI.
Entre 1996 y el 2001, dice el documento, los paramilitares ejecutaron más de 70 masacres contra campesinos a quienes acusaban arbitrariamente de apoyar a las Farc. También se registraron asesinatos de campesinos que vivían en rutas de tráfico de alucinógenos, esto presuntamente para no tener testigos de sus actividades narcotraficantes. Hubo masacres en todos los municipios, pero los más afectados con ellas fueron El Carmen de Bolívar con 18, Ovejas con 7, San Onofre con 6, San Jacinto con 6 y María la Baja con 6.
El informe señala que los 'paras' se aliaron con autoridades locales y regionales, así como con la Fuerza Pública.
(En otras noticias: El choque de la Corte Suprema y la Constitucional por el caso de Arias)
Incluso, se señala directamente que el Estado no protegió a la población campesina, por el contrario, dice la investigación, tuvo responsabilidades directas por acción u omisión ante las acciones perpetradas por el paramilitarismo por más de una década, y participaciones cómplices en algunas de las masacres perpetradas.
A pesar de las tres décadas de conflicto, la investigación también recoge los esfuerzos de algunos campesinos por volver a sus tierras en Montes de María, y han surgido movimientos sociales en demanda de la paz y de los derechos de las víctimas.
JUSTICIA
En Twitter: @JusticiaET
justicia@eltiempo.com
Comentar