“Ya no somos enemigos militares”, dijo el ministro de la Defensa, Luis Carlos Villegas, refiriéndose a las Farc y a la directa implicación de la entrada en vigencia del cese bilateral del fuego y de hostilidades.
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Villegas reiteró a EL TIEMPO que las acciones delictivas serán perseguidas por la Fuerza Pública sin importar qué grupo las perpetre.
Para el ciudadano del común, ¿qué significa el cese bilateral del fuego?
A pesar de que en las grandes ciudades las personas no sienten el conflicto con la misma intensidad que en los territorios, para todos, rurales y urbanos, el cese del fuego que empezó este lunes debe significar un gran cambio. Para los que han vivido el conflicto, vivir la tranquilidad del día a día; para los que no lo han vivido, poder pensar en un país donde se puede construir la paz y la prosperidad. (Además: Farc dicen que 'cumplirán con rigurosidad cese del fuego')
Pero los efectos tangibles y cotidianos del cese del fuego son para todos nuestros territorios azotados por la violencia. Es tal vez la mejor noticia que ha recibido nuestra Nación en los últimos 100 años.
Después de 52 años de conflicto con las Farc, ¿cuáles son las ventajas?
Para la población civil trae todas las ventajas, como saber que hoy no hay ánimo bélico por parte de las Farc hacia el Estado, hacia la población civil. Porque este cese del fuego no es solamente de los fusiles, es también de hostilidades; es decir que las Farc no pueden seguir delinquiendo en contra de la población civil. Este cese del fuego y de hostilidades debe significar el cese de la extorsión, de toda amenaza o constreñimiento, que cese todo vínculo de las Farc y la comisión de delitos, especialmente los relacionados con el crimen organizado: narcotráfico, minería ilegal...
¿Cómo se va a blindar este cese bilateral del fuego de grupos al margen de la ley, como el Eln, el 'clan Úsuga' u otras estructuras?
El cese del fuego no es una patente para delinquir. Ha cesado el fuego, ha cesado la persecución y el ánimo bélico contra las Farc y de las Farc contra el Estado, pero no ha cesado la persecución por parte de la Fuerza Pública a los delitos, a la comisión de toda clase de violaciones a la ley, que serán perseguidas con toda la dureza. Cuando una persona esté delinquiendo, no se le va a preguntar si es de las Farc o del Eln o del ‘clan del Golfo’; simplemente se le va a conducir a la justicia para que sea llamada con culpabilidad a una sanción. Eso ocurrirá en todo el país. Para los delitos que tienen que ver con el conflicto, habrá ese cese del fuego que significa que podrán empezar las Farc a desplazarse a esas zonas de concentración con el fin de que puedan desmovilizarse y desarmarse; pero la persecución al delito se mantendrá en todo el territorio nacional.
Tenemos por primera vez en la historia del país la verificación internacional con las Naciones Unidas. Allí podrán acudir tanto integrantes de la Fuerza Pública a denunciar como población civil, y será Naciones Unidas la que dirá si hubo violación del fuego y de hostilidades.
JUSTICIA