Gustavo Petro Urrego saltó a la arena política como miembro de la Alianza Democrática M-19, partido creado en 1991 tras la desmovilización de esa guerrilla, en la que militó 13 años.
Años atrás había sido concejal independiente, en Zipaquirá. Pero fue con el M-19 con quien llegó a la Cámara de Representantes. De hecho, intentó repetir periodo, en 1994, pero los votos no le alcanzaron.
En 1998, avalado por el Movimiento Vía Alterna –que fundó con Antonio Navarro–, volvió a conseguir curul.
Luego hizo parte de los cuadros directivos del Polo Democrático (2005), que buscaba reunir a las fuerzas de izquierda. Pero tras diferencias con algunos dirigentes, decidió fundar el movimiento Progresistas. Con este aspiró a la presidencia por primera vez en el 2010 y quedó en cuarto puesto, con 1,3 millones de votos.
Para esta elección, llegó a primera vuelta con el apoyo de la UP y de algunos sectores del Polo Democrático y de la Alianza Verde, en donde milita su fórmula vicepresidencial, Ángela María Robledo.
Antes se sometió a una consulta popular, en la que derrotó al exalcalde de Santa Marta Carlos Caicedo, con 2 millones 846.000 votos. De hecho, Petro le había prometido llevarlo como fórmula vicepresidencial.
Tras obtener el segundo lugar en la primera vuelta, con 4 millones 850.000 sufragios, Petro obtuvo la adhesión de algunos sectores. En efecto, aunque Sergio Fajardo optó por el voto en blanco, su segunda, Claudia López, se fue con Petro, al igual que el senador Antanas Mockus.
Su discurso gira en torno a la equidad social, redistribución de la riqueza, libertades individuales y a la defensa e implementación de los acuerdos de paz.
Padres: Gustavo Petro Sierra y Clara Urrego.
Esposa: Verónica Alcocer.
Hijos: Nicolás, Andrés, Andrea, Sofía, Antonella y Nicolás Alcocer.
Economista de la Universidad Externado.
Especialista en Administración Pública en la Esap.
Diplomado en Medioambiente de la Universidad Católica de Lovaina.
Holman Morris, concejal de Bogotá por el Movimiento Progresistas, funge como asesor programático de la campaña y es uno de sus principales consejeros.
María Mercedes Maldonado fue su secretaria de Hábitat en la Alcaldía y ahora es la coordinadora del comité que se encargó de la construcción del programa de gobierno de Petro.
Blanca Inés Durán, exfuncionaria de su alcaldía, es gerente de la campaña.
Gustavo Bolívar, senador electo, es otro de sus consejeros.
1990-1991
Asesor de la Gobernación de Cundinamarca
Desempeñó el cargo tras desmovilizarse del M-19. Antes fue personero y concejal de Zipaquirá.
1991-1994
Representante por la Alianza M-19
Asumió el cargo luego de la Constituyente de 1991. Su movimiento estaba compuesto por militantes de la Unión Patriótica, del Frente Popular y del Socialismo Democrático.
1994-1996
Agregado diplomático del gobierno Samper, en Bruselas
El presidente Ernesto Samper lo nombró en este cargo, luego de que Petro denunció que venía recibiendo amenazas de muerte.
1998-2006
Representante a la Cámara por el Movimiento Vía Alterna
Durante esa legislatura denunció el uso indebido del presupuesto del Fondo de Desarrollo Rural (DRI). Además se dio a conocer a nivel nacional tras debates en los que señaló con nombre propio a políticos de la costa Atlántica que hicieron acuerdos electorales con el paramilitarismo para llegar o permanecer en el poder, y que participaron en crímenes selectivos.
2006-2010
Senador del Polo Democrático
Obtuvo la tercera votación más alta: 143.000 sufragios. En la cámara alta continuó con sus denuncias sobre ‘parapolítica’ en varios departamentos y la acumulación de tierras por parte de empresarios y terratenientes.
2012-2015
Alcalde de Bogotá
Ganó con 721.308 votos. Su gestión fue cuestionada, entre otras cosas, por el cambio del modelo de recolección de basuras, por lo que fue destituido. Igualmente, por la aprobación del POT por decreto, luego de que el Concejo se lo rechazara.
En nuestro gobierno, los corruptos van a tener que ir a la cárcel y devolver el dinero robado a las finanzas públicas. La política debe dejar de ser un negocio
Las víctimas y la sociedad colombiana conocerán toda la verdad y tendrán la garantía de que se aplicará justicia efectiva y pronta contra los victimarios
Vamos a poner un impuesto por la improductividad de la tierra fértil mayor a 500 hectáreas; el Estado la compraría para dárselas a campesinos con vocación agraria
UNIDAD INVESTIGATIVA
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