Una vez aprobada la reforma tributaria en su totalidad, sin necesidad de una conciliación, los expertos en el tema empiezan a echar número y a preocuparse por lo que se le viene encima al país.
Que impactará negativamente la bolsa pública, que habrá mayor déficit fiscal y, por consiguiente, el país tendrá que echar mano de más endeudamiento, que las medidas sociales no le aportarán mucho a la meta de reducir la inequidad.
En esas está ahora el debate nacional, luego del que dieron los congresistas en Senado y Cámara durante toda la semana. El primer año no habrá dificultad, pues el ingreso esperado será de 13,5 billones de pesos, es decir, casi el total de lo que se esperaba obtener con la ley de financiamiento, cuando se buscaba gravar con IVA a toda la canasta familiar (14 billones de pesos).
Una de las preocupaciones de economistas como Juan Carlos Echeverry, exministro de Hacienda, es que el alto ingreso esperado en el 2020 se sustenta en un mayor crecimiento y en el control a la evasión a través del fortalecimiento de la Dian.
Otro de los ingresos esperados es el que proviene de la sobretasa al sector financiero, la cual en el 2020 aportará 0,7 billones de pesos, aunque el presidente de Asobancaria, Santiago Castro, ya ha anunciado que demandará de nuevo la norma por considerarla inequitativa frente a los demás sectores de la economía.
También habría otro ingreso, calculado en 3,4 billones de pesos, por cuenta de mayores impuestos a las personas naturales de altos ingresos (una tarifa más alta en el impuesto de renta a los que tengan mayores ingresos; gravamen a los dividendos e impuesto a patrimonios de más de 5.000 millones).
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Por lo demás, lo que hay son restas, pues las medidas como la devolución del IVA a la población más vulnerable, en la que entran como beneficiarios el 20 por ciento de la población; los 3 días sin IVA y la reducción escalonada del aporte a la salud de los pensionados.
Sin embargo, el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, tranquilizó a los parlamentarios durante los debates, quienes reclamaban que era muy costoso el montón de beneficios tributarios que les estaban otorgando a las empresas, lo que tasaron en 9 billones de pesos por año.
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Según Bloomgerg, la calificadora Fitch Ratings ha estimado que la reforma tributaria tendrá un impacto fiscal negativo equivalente a 0,7 % del producto interno bruto (PIB) en el 2020, pero la expectativa oficial es que la balanza se equilibre.
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