El Ministerio de Sanidad español está analizando 30 partidas de carne procedente de Brasil, donde una operación contra la corrupción destapó que algunos productores estaban introduciendo en la cadena alimentaria, en connivencia con inspectores del Ministerio de Agricultura, carne en mal estado, caducada e incluso podrida, en ocasiones tratada para disimular su estado real. En respuesta a ‘El País’, Sanidad explica que se trata de 22 partidas de la empresa BRF y ocho de JBS, dos gigantes cárnicos brasileños que se encuentran entre las 29 empresas salpicadas por el escándalo.
En cualquier caso, el Ministerio español subraya que “no existe a día de hoy ninguna alerta por carne procedente de Brasil en el sistema de alertas alimentarias europeas”.
(Infografía: ¿Carne en mal estado o maquillada? Aprenda a identificarla)
Tras el caso destapado en Brasil, tanto la UE como otros países tratan de asegurarse de que ningún producto en mal estado llegue a los consumidores.
Por el momento, en Europa no se ha detectado ninguna partida en malas condiciones.
Aunque el Ministerio quiere subrayar que no existe ninguna alerta a nivel europeo por carne procedente de Brasil y que “los procedimientos de control sanitarios de carne para consumo humano son muy estrictos”, explica que ha contactado con la Comisión Europea “solicitando información específica sobre los productos y los establecimientos implicados, así como las anomalías detectadas, con especial referencia al posible uso de sustancias carcinogénicas”.
En la investigación brasileña se ha afirmado que la carne en mal estado en ocasiones era maquillada a base de inyecciones de sustancias potencialmente cancerígenas.
El Ministerio de Sanidad informa que “el mismo día 19”, cuando se conoció el escándalo, se procedió a “extremar las medidas de vigilancia”, intensificando los controles en los Puestos de Inspección Fronterizos (PIF) “ante la importación de carne fresca o productos a base de carne de aves de corral, vacuno o porcino de las empresas BRF S. A. o JBS de Brasil”.
Como fruto de esas inspecciones, 30 partidas están actualmente “en proceso de control sanitario”. 22 corresponden a BR Foods y otras ocho a JBS.
El Ministerio no ha especificado la cantidad ni el tipo de carne que está siendo inspeccionada. Sí explica que, en lo que va del 2017, España ha importado 123 partidas de BRF y otras 96 de JBS, sin que se hayan detectado “en ningún caso anomalías sanitarias en los controles sanitarios ni en los realizados en el marco del Plan de Vigilancia de sanidad Exterior, que afectaron a ocho partidas”.
(Además: En Colombia no hay riesgo de consumir carne adulterada de Brasil)
Y explica que, ante una solicitud de importación, el protocolo de actuación del Ministerio incluye la inmovilización de la mercancía, control documental y de identidad y un “control físico exhaustivo sobre el 100 % de las partidas”, lo cual incluye el control organoléptico (lo que puede ser percibido por los sentidos) y del etiquetado, toma de muestra por sospecha, análisis microbiológico y, en último término, un dictamen del resultado. Una fuente del Ministerio dijo desconocer cuánto puede demorarse este proceso.
JAVIER SALVATIERRA
Ediciones EL PAÍS, SL 2017
Comentar