Los relevos en dos viceministerios de Hacienda, cuyos titulares salen de un solo golpe, y un nuevo timonel en la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) entrarán a jugar en el ajedrez del Gobierno para la recta final de la administración actual.
Grandes retos tendrán los que lleguen a reemplazar al viceministro de Hacienda general: Dimitri Zaninovich, quien pasa a tomar el mando de la ANI en reemplazo de Luis Fernando Andrade, que se retira para afrontar los trámites legales en su implicación en el caso Odebrecht. Entre tanto, Andrés Escobar, viceministro técnico –cuya renuncia se produjo de manera simultánea con el llamado del presidente Juan Manuel Santos a Zaminovich, homólogo de este, para encargarlo de continuar la labor de la ANI–, se va del cargo para retomar funciones directivas en la firma EConcept.
Lo que se requerirá de los nuevos funcionarios será una gran agilidad para embarcarse rápidamente en la meta de poner a andar las obras de infraestructura en curso (en el caso de la ANI), al igual que seguir haciendo las tareas inmediatas para conducir las finanzas públicas, además de sacar adelante los proyectos de ley de corte económico que cursan en el Congreso (en el caso de los viceministros).
De hecho, tras hacerse oficial su nombramiento, Zaninovich dijo que asumirá el reto para lograr buenos desempeños financieros y de construcción, de la llamada revolución de la infraestructura. El nuevo director de la ANI es economista de la Universidad Nacional, especialista en finanzas y cuenta con maestría en política pública.
Su relación con el sector de infraestructura viene de sus cargos en el Ministerio de Transporte (jefe de Regulación Económica y viceministro de infraestructura), en Planeación Nacional (director de infraestructura), entre otros).
Escobar es economista y magister en la misma área, con una candidatura a Ph. D. en Economía en la Universidad de Nueva York. Permaneció por tres años en el viceministerio.
Comentar