Un corrillo de taxistas furibundos, y vestidos con las camisas color púrpura que distinguen a los transportadores del aeropuerto, criticaba la noche del miércoles a todo volumen la crisis que deja en la Cartagena el séptimo día de paro de pilotos de Avianca, en una muestra del bajonazo en la economía de una ciudad que respira turismo.
“Ajá, jodidos. Todo el mundo: hoteles, restaurantes, transportadores y rebuscadores”, decía uno de los taxistas desencantados.
Dentro del internacional aeropuerto Rafael Núñez, una pareja de brasileños celebraba que había conseguido vuelo a Bogotá para las 8 de la noche. Rezaban para que la conexión Bogotá– São Pablo, programada para hoy a las 10 de la mañana, se mantuviera.
“Avianca nos prometió un vuelo con otra aerolínea, OceanAir”, explicó el viajero carioca.
De las cinco ventanillas que Avianca tiene para atención al usuario y que normalmente están copadas de viajeros , anoche solo operaba una.
Los hoteles agrupados en la Asociación Hotelera de Colombia (Cotelco), capítulo Cartagena, reportaron la cancelación o aplazamiento de reservas de 1.500 noches en los últimos siete días como consecuencia del paro de pilotos de la aerolínea Avianca.
“Esto representa una pérdida del 12 por ciento en la ocupación de los hoteles agremiados a Cotelco, que agrupa a más de 60 hoteles, grandes, pequeños y de lujo”, dijo Martha Lucía Noguera, presidenta de Cotelco en esta ciudad.
“Hay aerolíneas que están cobrando por trayecto Bogotá-Cartagena-Bogotá hasta 1’800.000 pesos, y tenemos el caso de una aerolínea que está cobrando 4’900.000 por un trayecto Bogotá-Cartagena-Bogotá”, denunció Noguera.
En La Guajira, la huelga de los pilotos de Avianca poco ha afectado la operación de los dos vuelos diarios de la única aerolínea que cubre la ruta nacional y llega al aeropuerto Almirante Padilla, de Riohacha.
De acuerdo con lo señalado por la Concesión Aeropuertos de Oriente, de los siete días de huelga solo han sido suspendidos tres vuelos en la ruta Bogotá–Riohacha–Bogotá, con una afectación del 21 por ciento.
La suspensión de uno de los dos vuelos diarios de Avianca se registró los días 20, 21 y 22 de septiembre. Y en dos días 121 pasajeros se vieron afectados.
Ayer, Avianca operó normalmente. Lo único fue que los vuelos salieron con dos horas de retraso.
Enna Madero, gerente de la operadora de turismo Guajira Tours, asegura que han tenido muchas dificultades para la consecución de nuevos tiquetes.
“Toca hacer lo humanamente posible para conseguir cupos por LAN o cualquier otra aerolínea que esté volando por Barranquilla, Santa Marta o Valledupar, que han sido nuestras alternativas para sacar a la gente”, dijo.
El problema radica al intentar conseguir un cupo en los vuelos con fechas cercanas, pues es más fácil conseguir de octubre en adelante.
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