Hace apenas unas dos semanas, el pastuso Luis Fernando López se colgó la medalla de oro que lo acredita como campeón mundial de los 20 km de la marcha, del certamen realizado en Corea en 2011, y llega a la carrera de los Juegos Olímpicos, hoy, a estrenar ese galardón.
Esa vez, Valeriy Borchin y Vladimir Kanaikin lo superaron en la meta, fueron oro y plata, respectivamente, pero se vieron involucrados en casos de dopaje y fueron despojados de sus medallas, y la de oro fue para el colombiano de 37 años.
Hace 4 años en Londres vio la tarjeta roja, fue expulsado de la competencia por cometer faltas. Ese día, salió de la calle principal que daba al palacio de Bukcingham, llorando se dirigió hacia donde estaban unos buses y le pegaba a uno de ellos con el puño: “Y ahora qué le voy a llevar a mi hija”, gritaba, mientras no paraba de llorar.
“Me acuerdo de ese momento y me quedo con la sensación de que en qué momento se caían esas tarjetas. Pienso que ese día estaba para darle a Colombia un metal. Recuerdo que iba bien, que me hubiera ido mal hubiera sido plata, pero me quedo con lo bueno”, dijo López.
Hoy, cuatro años más tarde, la revancha es en Río de Janeiro y el mejor aliciente es el oro que llegó desde Europa, cuatro años y medio más tarde, pero llegó.
López estrenará ese título, precisamente en los Olímpicos y quiere hacer una buena actuación.
“Sé que Río es una competencia diferente. Este ciclo olímpico ha sido distinto, porque hay otras personas a cargo de mis entrenamientos, hay otras sensaciones. Primero, decidí apostarle a los 50 y a los 20 km y fue muy productivo”, precisó Luis Fernando, que además de pertenecer a la Policía Nacional es contador público.
Sabe que la competencia no será fácil, pero aseguró que no había venido a los Olímpicos a disfrutar de una inauguración. No fue fácil la clasificación, porque siete atletas consiguieron la marca mínima
“Si estamos pensando como deportistas en ir a juegos a disfrutar una inauguración, a tomarnos una foto con deportista de mucho rendimiento, a alardear dé el en redes sociales no estamos en nada, debemos concentrarnos en que los olímpicos son una buena oportunidad de demostrarle a las personas que somos capaces de ir por más, pensando no solo en rio, sino ya en Tokio”, aseguró.
Ya está pensando en el retiro, ya tiene en mente a lo que se a dedicar, pero primero quiere salir de este duro reto en Brasil, porque tiene claro que estos serán sus últimos Olímpicos.
“Siempre quise retirarme con un mundial de atletismo y va a ser en Londres. Primero Río, luego unas vacaciones, analizar el panorama y si está el deseo y las ganas luchar por el cupo hacia Londres, si no, parar y dedicarme a otras cosas”, agregó.
LISANDRO RENGIFO
Enviado especial de EL TIEMPO
En Twitter: @LisandroAbel
