El abridor Corey Kluber logró marca histórica al lanzar seis episodios y el receptor puertorriqueño Roberto Pérez hizo lo propio al pegar dos jonrones que encendieron el ataque ganador de los Indios de Cleveland, que blanquearon 6-0 a los Cachorros de Chicago en el primer partido de la Serie Mundial.
En un duelo entre los dos equipos con las sequías más largas en título de la Serie Mundial, los Indios iniciaron un ataque desde el primer episodio con dos carreras y abrieron el camino rumbo a la victoria. Mientras que los Indios buscan su primer título desde 1948, los Cachorros lo esperan desde 1908.
La novena de Cleveland pone marca de 1-0 sobre los Cachorros en la serie que se juega al mejor de siete para obtener al equipo campeón en el Clásico de Otoño. De acuerdo a las estadísticas históricas el ganador del primer juego se ha acreditado el título en las últimas seis series y en 17 de las últimas 19 ocasiones.
Aunque las estadísticas no afectan a los Cachorros, éstos empezaron con una derrota su primer juego de Serie Mundial desde 1945. Kluber (1-0) hizo un trabajó sólido desde lo alto del montículo y en seis episodios permitió sólo cuatro imparables y ponchó a nueve enemigos para acreditarse la victoria. Además los disparos de alto calibre que lanzó le permitieron hacer historia.
Kluber se convirtió en el primer lanzador en la historia de la Serie Mundial en sacar ocho ponches en las tres primeras entradas de un juego del "Clásico de Otoño".
Los lanzadores Bob Gibson, Randy Johnson y el cubano Orlando Hernández lograron siete ponches cada uno en los primeros tres episodios de sus respectivas aperturas en la Serie Mundial. Hasta el momento los Indios han tenido sólo dos lanzadores en su historia con 10 o más ponches en un partido de fase final.
Charles Nagy consiguió 12 en el cuarto juego de la Serie Divisional de la Liga Americana contra los Orioles de Baltimore en 1996, mientras que el dominicano Bartolo Colón tuvo 11 en el primer juego de la Serie Divisional frente a los Medias Rojas de Boston en 1999, y 10 en el primer juego de la Serie Divisional del 2001 contra los Marineros de Seattle.
Si Kluber hizo historia, el nombre de Pérez también quedó registrado en los libros de marcas de las Grandes Ligas al convertirse en el primer toletero que sale noveno en el orden de bateo en pegar dos jonrones en un partido de Serie Mundial.
Pérez fue el bateador clave al conectar par de cuadrangulares y terminar con cuatro carreras remolcadas de las seis que consiguió su equipo para ganar. El boricua (2) empezó a sacar chispas con su madero en el cuarto episodio al pegar batazo de cuatro esquinas sin corredores por delante. Pérez enfrentó los disparos del abridor Jon Lester sacó batazo que mandó la pelota a volar 388 pies entre los jardines izquierdo y central.
El cuadrangular del boricua descontroló la serpentina de Lester, que después del jonrón sacó cinco outs más y no pudo resistir el ataque de la batería de los Indios. Pérez nuevamente hizo levantar de sus asientos a los 38.091 asistentes al "Progressive Field", de los Indios, cuando en el octavo episodio nuevamente desapareció la pelota del campo.
El segundo jonrón que Pérez conectó en la tarde vino en el octavo episodio contra los servicios del cerrador venezolano Héctor Rondón. Pérez llevaba a dos compañeros por delante cuando había dos outs en el episodio, en el momento en que la pelota volaba 404 pies nuevamente por los jardines izquierdo y central.
El receptor puertorriqueño tuvo cuatro oportunidades con el bate y conectó en dos ocasiones, en ambas para botar la pelota, remolcó cuatro carreras y puso en .500 su promedio con el tolete. Su compatriota el parador en corto Francisco Lindor no se quedó atrás y fue el segundo mejor bate de la novena de los Indios al hacer cuatro presentaciones ante el lanzador y pegar tres veces a la pelota.
Lindor, de 22 años, pisó una vez la registradora y puso en .750 su promedio con el bate. El antesalista dominicano José Ramírez empuñó bien el tolete y en cuatro viajes a la caja de bateo pegó tres imparables.
Ramírez se encargó de darle movilidad a la pizarra en el primer episodio cuando pegó sencillo a la tercera y mandó a Lindor a la registradora con la primera carrera del juego. Los Cachorros pegaron siete imparables, tres de ellos del guardabosques Ben Zobrist, el bateador designado Kyle Schwarber, el segunda base puertorriqueño Javier Báez, el bateador emergente venezolano Willson Contreras y el receptor David Ross pegaron sendos indiscutibles.
Báez hizo contacto sólo en una de cuatro oportunidades con el tolete, mientras que Contreras pegó en una de dos ocasiones frente a los lanzadores de los Indios. La derrota la cargó Lester (0-1) en cinco episodios y dos tercios, y recibió castigo de seis imparables, un jonrón y tres carreras, dio tres pasaportes y ponchó a siete enemigos.
El segundo juego se llevará a cabo el miércoles en el mismo campo de los Indios, el "Progressive Field", cuando el equipo de Cleveland tendrá en el montículo a Trevor Bauer, que se enfrentará al estelar de origen boricua Jake Arrieta. Debido a que se pronostica lluvia el inicio del juego se adelantó una hora.
EFE
