Si el fútbol es un juego a hacer goles y en el que gana el que más hace, pues es imposible, inadmisible e inconcebible eso de jugar bien sin hacer goles. No hay tautología mayor en el fútbol, no hay fórmula de verdad diferente. Eso de que se jugó bien, de que es un gran equipo, de que fue un muy buen partido, pero “solo faltó definir” o “lo único que no hicimos fue meterla” o “únicamente nos falló la efectividad”, pues es como comerse una magnífica cazuela de mariscos... ¡sin mariscos!
El que cree que juega bien al fútbol sin hacer goles, pues es como el panadero que hace una esponjosa masa y la amasa, pero quema el pan.
Los intentos de definiciones de ‘jugar bien’ pueden ser muchos más que los 155 años del fútbol mismo, y la discusión sobre lo que es eso es tan vieja como el sol. Por lo general se confunde entre jugar bonito y jugar bien y se equipara el concepto con ser ofensivo o defensivo. Pero para jugar bien, ya sea al ataque o a la defensa, ya sea bonito o feo, hay que hacer goles, hacer más goles que el rival, así sea uno más. ¡Pero hay que hacerlo! Es un contrasentido, una aberración, eso de que el 0-0 es la perfección del fútbol.
Muchos reducen el jugar bien al juego de pases y posesión de la pelota. ¡Está tan de moda! Muchos creen que es ser un supertáctico defensivo. Ambas posturas son alimentadas por los técnicos y por sus siervos de culto.
Hay definiciones de ataque: para el ya fallecido Cruyff era “jugar de manera ofensiva, hacer un espectáculo. Se juega mal cuando se corre demasiado”. Bielsa dijo: “Prefiero el protagonismo con la pelota que la especulación. La única manera que entiendo el fútbol es la presión constante, jugar en el campo rival y el dominio de la pelota”.
Pellegrini lo definió así: “Jugar bien es cuando te ven los espectadores, los que quieren espectáculo y no que te encierres a defender el resultado”.
Simeone y Bilardo tienen tesis pragmáticas: “Jugar bien es ganar”, dijo Bilardo hace 35 años. Simeone amplió ese concepto: “El estilo es ganar. No me interesa gustarme a mí mismo ni a los demás. En el debate entre la posesión o ser directos, no se trata de decirles a los demás lo que quieran escuchar, sino hablar con la verdad. Y si yo no tengo los jugadores para elaborar una posesión sostenida, no debo intentar lo que no puedo realizar. Todos los partidos no los podés jugar igual. No podés jugar de la misma manera ni con los mismos jugadores, prefiero jugar bien a jugar lindo”.
Hay una famosa frase que hasta variantes tiene: “Si quieren espectáculo, vayan al teatro” –o al circo o al cine–. Eso lo han dicho varios.
¿Ninguno de estos gigantes de la técnica y la táctica habló de hacer goles? Supongo que está implícito, que por sabido lo callan. Lograrán que sus equipos hagan todo eso que dicen, pero si atacando o defendiendo “solo les falta definir” o “lo único que no hacen es meterla” o “únicamente fallan en la efectividad”, nunca, pero nunca, habrán jugado bien al fútbol.
Meluk le Cuenta...
GABRIEL MELUK
Editor de Deportes
En Twitter: @MelukLeCuenta