La Selección Colombia enfrenta este jueves a Venezuela, equipo que está en el último lugar en la eliminatoria suramericana para el Mundial de Rusia.

Colombia marcha en el segundo lugar y va tras su clasificación al Mundial: la tiene cerca, la acaricia, pero todavía no la ha logrado.

“Con Venezuela son partidos atípicos, duros, no son para nada fáciles, independientemente de lo que se esté jugando. No va a ser un partido fácil, pero tenemos la necesidad de seguir sumando puntos para lo que queremos, que es clasificar al Mundial”, dijo Cuadrado.

Los futbolistas colombianos no se engañan: si juegan al ritmo al que deben jugar, si juegan al nivel que tienen que tener, si plasman en la cancha su mejor versión, este es un partido ganable, con James o sin James.

“La potestad del jugador en este momento es la Selección Colombia, y somos nosotros los que decidimos (...). Estamos viendo la evolución de su lesión y nos tiene muy contentos el estado en que está”, aseguró Pekerman sobre la participación de James.

El corredor vehicular, que se habilitó de manera temporal para garantizar el traslado de la Tricolor hacia la ciudad venezolana de San Cristóbal, estuvo rodeado de expresiones de euforia.

Una apertura de frontera similar no se veía desde el pasado 30 de abril de este año, cuando el Gobierno del vecino país promovió una jornada de retorno de seis horas para vehículos con placas venezolanas.

Para agilizar el paso de personas por el Puente Internacional Simón Bolívar, uno de los que conectan a Norte de Santander con el Táchira, el control migratorio será realizado por tres oficiales que contarán con dispositivos especiales para realizar el trámite en menos de 30 segundos por persona.

Las autoridades prevén que cerca de 15.000 ciudadanos colombianos viajen a Venezuela por el partido.